La mayoría de las ensaladas tiene como ingrediente principal la lechuga, por lo que a muchas personas se les hace muy aburrido comer lo mismo y, a la vez, tedioso porque se tiene que rebanar, lavar y desinfectar.
Sin embargo, hay otros vegetales que pueden sustituir o acompañar a la lechuga, como son la arúgula o rúcula, que se trata de un alimento que casi no se encuentra en la alimentación habitual de los seres humanos.
La arúgula y sus muchos beneficios
La arúgula es un tipo de hortaliza de la familia de las brasicáceas, que es considerada como un tipo de verdura de hoja, culinariamente hablando. Con este nombre se sabe de tres especies: Eruca vesicaria, Diplotaxis tenuifolia y Diplotaxis muralis.
Lo que la gente desconoce es que la arúgula proporciona una serie de beneficios a la salud y tiene un sabor vigoroso, lo cual la diferencia de todos los demás vegetales verdes.
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Además, tiene un alto contenido de clorofila y se compone de glucosinolatos, beneficiando al buen funcionamiento del hígado, debido a que neutraliza la presencia de metales pesados en el organismo, evitando una sobrecarga y convirtiéndose en un buen método detox.
También cuenta con una gran cantidad de fitoquímicos, es decir, vitaminas vegetales que ayudan contra enfermedades crónicas como el cáncer y la diabetes. Está repleto de vitaminas esenciales como la vitamina K, lo cual ayuda a absorber el calcio de los huesos y a disminuir la calcificación del cerebro, previniendo al mismo tiempo, el Alzheimer.
¿De qué manera se puede consumir la arúgula?
Por su distinguido sabor, la arúgula puede consumirse cruda, ya sea en una ensalada con lechuga, jitomate y aguacate. También puede servirse junto a carne roja o se pueden agregar algunas hojas en una pizza o sándwich.
Con información de Directo al Paladar México
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