Existen muchos motivos por los que las mujeres realizan ejercicio, y la creencia colectiva nos hace pensar que cualquiera de estos es correcto pues al final del día, el ejercitarte va a traer beneficios a tu salud; sin embargo, muchas de esas razones pueden ser las causantes de que no veas resultados o te esté costando mucho más trabajo del que debería, además de desmotivarte y volverte muy dura contigo misma. Este Día de la Mujer, es importante reflexionar sobre los estereotipos de belleza y las razones para entrenar.
En este 8 de marzo, Día de la Mujer, es importante destacar cuáles deberían ser las razones correctas para hacer ejercicio, no solo por el físico ni para perder peso, sino para lograr un estilo de vida saludable y aumentar nuestro amor propio.
1. Demasiado foco en perder peso
El peso es únicamente un número, no debes enfocar toda tu atención en él, pues tu progreso va mucho más allá de la pérdida de peso.
2. Poca comida
Uno de los errores más comunes al querer transformar el cuerpo es pensar que entre menos comamos, más rápido bajaremos de peso y se notará un cambio, esto es totalmente falso, pues los músculos requieren energía y proteína para crecer; además de limitar los resultados, esta creencia también puede presentar un riesgo a tu salud.
Te podría interesar
3. Baja intensidad en el entrenamiento y máximo enfoque al cardio
Nuestro inconsciente está rodeado de imágenes en las que las marcas deportivas muestran a hombres sudando y a mujeres posando, y eso no podría estar más alejado de la realidad. El verdadero trabajo estará en la combinación de ejercicio aeróbico con ejercicio de fuerza, es por eso que Erre Barre es el ejercicio perfecto para cambiar esta percepción, ya que combina a la perfección el cardio y la fuerza.
Muchas de nosotras hemos empezado a entrenar pensando que tenemos que hacer ejercicio para parecer modelos de pasarela y se vuelve inevitable comparar nuestro cuerpo con lo que vemos día a día detrás de una pantalla; sin embargo, alcanzar dichos estándares de belleza e intentar transformar nuestros cuerpos en lo que pensamos son "cuerpos perfectos" es en una de las razones más erróneas y comunes que puede haber. Cada cuerpo funciona de manera diferente, y aunque te mates haciendo ejercicio, puede que nunca llegues a verte con quien te has comparado, pues hay un sin fin de factores que pueden ir desde la alimentación, hasta la genética, que influyen en la construcción de cuerpos delgados y estilizados, que para muchos, es el estándar máximo de belleza.
Cuando existen estos pensamientos, es muy fácil perderse en el camino y desmotivarse pues los resultados no serán lo que esperas, es por eso, que necesitas cambiar tus objetivos. Hoy te invitamos a dejar de entrenar para tener un “cuerpo perfecto” y empezar a entrenar para sentirte fuerte, valiente y poderosa. Solo así entenderás que eres mucho más que tu apariencia, y aprenderás a amar aún más tu cuerpo cuando empieces a notar los pequeños cambios que se traducen en grandes esfuerzos, ayudándote a convertir resultados momentáneos en resultados de largo plazo.