Tener un suave lomito de mascota nos puede dar muchas alegrías, primero porque si es muy joven, será juguetón y todo lo querrá morder. Amará estar a tu lado y acompañarte en todo momento. Científicos han afirmado que tener un perro hace tu vida más feliz, pero ¿cómo podría ser algo recíproco? Me refiero a cómo podrías también hacerlo feliz. De entrada, debes saber que tu perro, al estar a tu lado ya es feliz.
Sin embargo, el momento que compartes con él para jugar o distraerte, lo puedes emplear también para darle un buen masaje que lo relaje y de ser posible, ya no tenga necesidad de morder todos los objetos.
Los beneficios de masaje en perros son muchos, brindan una inmensa sensación de bienestar, el estrés y la ansiedad desaparecen. Alivia el dolor y estimula la circulación. En cachorros mejora el desarrollo del cerebro y la socialización. Otra razón es que la relación entre tu perro y tú se fortalecerá.
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Previo al masaje
- Lo primero que debes hacer es quitarte pulseras o anillos que puedan lastimar a tu mascota; también deberás quitarle el collar o arnés para que cuando pases tus manos, no tengas ningún obstáculo.
- Lo mejor es hacer el masaje en una habitación tranquila o en un jardín, o un lugar donde se encuentre cómodo y se relaje; puedes hacer uso de musicoterapia y mantenerlo en una superficie plana.
- Tu estado de ánimo es muy importante, ya que se comparte la energía de ambos. Por lo que será necesario que te mantengas sereno al momento de masajear a tu perro.
Pasos a seguir
- Empieza por colocar una mano en su lomo sin movimiento, si su reacción es buena y con ganas de recibir el masaje, comienza con movimientos suaves que recorran desde su cabeza hasta su lomo.
- Con caricias suaves y movimientos circulares en la base de las orejas, tu perro comenzará a relajarse.
- Continúa por las cervicales en dirección del crecimiento del perro; alarga los movimientos desde loas cervicales hasta la cola a ritmo lento.
- No dejes de mantener contacto con la piel del animal; utiliza ambas manos.
- Posteriormente, trabajarás la zona de las caderas con el mismo movimiento.
- Después bajarás a las patas del amigo peludo, y en el mismo sentido del crecimiento de pelo, guiarás tus manos con suaves movimientos
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