Sin duda el 2020 fue un año de mucho movimiento en todos los sentidos de la vida: aprendimos a realizar la mayoría de las actividades desde casa; los niños por su parte fueron los más aplicados porque no tuvieron opción y practicaron con ensayo y error a tomar clases a distancia, jugar entre paredes y continuar reforzando sus relaciones sociales con sus pares y familiares a través de una pantalla.
Hoy finaliza un ciclo de crecimiento, aunque el tiempo es un concepto abstracto para los niños y lo aprenden con lentitud ya que no se puede ni ver ni tocar y justo tocando y viendo es como ellos construyen los aprendizajes, sumado a que los peques viven en el presente, no tienen conciencia de haber estado en el pasado y mucho menos del futuro, podemos enseñarles de forma sencilla el cambio de número de año como una transición o un movimiento de la vida, para eso te damos unos sencillos consejos para resaltar en los niños la importancia del cambio de año.
1. El niño se orienta en el tiempo a base de hábitos y rutinas diarias, podemos introducir el aprendizaje a través del juego usando el calendario, reloj infantil y cuentos alusivos al cambio del tiempo.
2. Hacer conciencia en ellos sobre la importancia del calendario como un esquema visual que nos permite medir el tiempo entre el pasado, el presente y el futuro, que además se divide en año y cada año contiene: números, días, semanas y meses.
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3. Debemos hacerles hincapié que el tiempo no regresa nunca, que solo una vez en la vida se cumplen 3 años, 4 o 5 y las vivencias lindas podrán repetirse pero nunca serán las mismas y por supuesto que están creciendo todo el tiempo (ahí puedes mostrarle fotos de su diferentes edades para que lo vayan ejemplificando por medio de la comparación).
4. Podemos comenzar por explicar la división del día: por la mañana, tarde y noche, esto se puede hacer por medio de fichas gráficas alusivas al momento del día con sol, sin él y la noche, también ayudándolos a tener conciencia de que hay actividades exclusivas de la mañana o de la noche que no se pueden realizar en otro momento.
5. Una vez trabajado los momentos del día seguimos con los días de la semana para que poco a poco vayan comprendiendo que hay 7 días, cada uno con un nombre diferente y la relevancia de conocerlos es que todos los días hacemos algo distintos, se los podemos enseñar por medio de canciones y comparando lo que se hace los días de clases y los de descanso (con horarios de dibujos).
6. El calendario nos permite organizar nuestros días y las actividades que hacemos, así como también las festividades que tendremos, recordar cumpleaños, celebraciones importantes, estaciones del año y organizar actividades futuras como citas al doctor, festivales, paseos. etc.
7. En pocas palabras, para cambiar de año tienen que pasar los días de los 12 meses que hay, los meses pueden tener 30 o 31 días como máximo, excepto febrero que tiene 28 y cada 4 años 29 días, cuando todos estos días transcurren habremos cambiado del año 2020 al 2021.
8. Con los más grandecitos podemos contar o hacer una numeración con ellos los 365 días comenzando por el 1 para que entiendan que cuando todos estos días pasan se cambia de año.
9. Los niños lo entienden mucho más haciendo referencia a ellos mismos, es decir, en el 2020 tenía 4 años y estaba cursando kínder 2 y en el 2021 cumplirá 5 y estará en kínder 3, antes no podía hacer algunas cosas y ahora con el paso del tiempo lo ha logrado.
10. Podremos hacer una lista comparativa entre el 2020 y 2021 con los cambios presentados en ellos, para que sea más significativo utilizando su cartilla de vacunación para ver su edad con su talla y peso, así como de las fotos de sus cambios físicos.
Todo esto del tiempo desarrolla en los niños su pensamiento matemático, así como la noción espacio y tiempo que le permita ser más creativo y favorecer la práctica de competencias útiles para la vida y la resolución de problemas.