Julián Figueroa sigue dando de qué hablar luego de que en julio pasado fuera captado en un restaurante de la Ciudad de México besando a una fan, pues esta vez su esposa, Imelda Garza, cansada de sus infidelidades habría lanzado una condición a cambio de no solicitar el divorcio y poner fin a su relación luego de casi 10 años juntos.
Joan Sebastian fue señalado de “mujeriego” y “ojo alegre” durante gran parte su carrera en la música, algo que esta vez metió en problemas a su hijo Julián Figueroa ya que atraviesa por una crisis matrimonial luego de que salieran a la luz imágenes en las que aparece besando a una fan que se acercó a él para pedirle un autógrafo, incluso, intercambiaron números de teléfono para encontrarse en otra ocasión.
Un amigo cercano a la pareja señaló en entrevista para TVNotas que el cantante, de 27 años, le pidió perdón a su esposa argumentando que la joven lo beso de manera sorpresiva y no había pasado nada más; sin embargo, el video que circuló en redes sociales muestra cómo Figueroa toca a la joven de “forma inapropiada” y también la acompañada entre abrazos a su taxi.
“Sí, dijo que todo estaba sacado de contexto (…) antes solo le quería echar la culpa a la revista, pero tras el video, ya ha dicho que no hay excusa, que ama a su esposa y que espera que logre perdonarlo, que es un error que él cometió, del cual se tenía que hacer responsable y tomaba tiempo sanar; que desafortunadamente la confianza tarda en recuperarse, pero que ahora debe seguir luchando por su familia”, dijo la fuente que permanece anónima a la revista de espectáculos.
Maribel Guardia intervino por su hijo
El supuesto amigo de la pareja también señaló que Imelda Garza explotó contra Julián Figueroa, pues no es la primera vez que el cantante le es infiel ya que mientras estaba embarazada fue captado con dos mujeres, Karina Reyes y Grette Durán, aunque el beso con la fanática fue lo que la orilló a tomar la decisión de divorciarse.
En medio del conflicto, Maribel Guardia habría intervenido para evitar el divorcio y fue entonces que Imelda Garza le puso la condición de tomar terapia de pareja a cambio de no terminar definitivamente con su relación y regresar a Monterrey a vivir con su familia.
“Desde ahí la situación está muy hostil. Julián le ha ofrecido disculpas públicamente, pero ella está harta de sus infidelidades (…) ella le pidió el divorcio, a lo que Julián se negó, por lo que Ime le puso la condición de que tomaran terapia de pareja, pues a ella ya no le bastan unas disculpas, ni que su mamá interfiera para decirles que luchen por su matrimonio”, añadió el amigo de la pareja.
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