La muerte de Selena Quintanilla no fue nada más un duro golpe contra los amantes del género Tex Mex, sino también u conglomerado de misterios que posiblemente nunca se resuelvan: ¿Por qué Yolanda Saldívar mató a la cantante?, ¿qué pasó con el anillo de la estrella?, ¿la intérprete pudo haber evitado el ataque?
Sin embargo, algo que parecía como un dato desconocido para el público y que gracias a las investigaciones forenses fue explicado es qué pasó con la pistola con la que la presidenta del club de fans de Quintanilla acabó con la vida de la ídolo.
¿Qué arma usó la asesina?
Yolanda Saldívar compró dos veces la pistola con la que pretendía disparar a la intérprete de “No me queda más”. La primera vez se arrepintió de esto y la devolvió; sin embargo, a unos días de esto volvió a la tienda y eligió el mismo modelo.
La mujer preguntó en ambas ocasiones cuál de los artículos de la tienda le serviría más para defenderse de algún agresor, a lo que el vendedor respondió que una Taurus modelo 88, casquillos .38 y mango de madera era la mejor elección.
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Tras pasar el periodo de investigación de tres días por el que suele pasar cualquier individuo que busca comprar un objeto de este tipo, la enfermera recibió el revolver a un precio de 232 dólares con 13 centavos, según indica la factura de la tienda A place to shoot (un lugar para disparar).
¿Como la encontraron?
Tras una discusión en la habitación 158 en el motel Days Inn, Yolanda disparó a la artista por la espalda. El impacto de la bala golpeó en el omóplato derecho de Quintanilla.
“La Reina del Tex Mex” huyó del lugar y llegó arrastrándose a la recepción del hotel. A la mujer que estaba ahí solamente dijo el número de la habitación y el nombre de su atacante. La voz de la estrella no volvería a ser escuchada.
Saldívar intentó escapar del lugar a bordo de una camioneta, pero al verse rodeada por policías que atendieron el llamado de emergencia, decidió colocarse el arma en la cabeza y amenazar con suicidarse.
Tras horas de negociación que fueron seguidas por los medios de comunicación, la mujer decidió salir. En el vehículo quedó el arma, la cual fue recuperada por oficiales en el lugar y tomada como prueba de la agresión.
¿Qué pasó con la pistola?
El homicidio ocurrió el 31 de marzo de 1995, pero no fue hasta el 23 de octubre de ese mismo año que la mujer fue declarada culpable y en noviembre condenada a prisión perpetua.
Durante el juicio se usó el arma como evidencia de lo ocurrido, pero al terminar este proceso se dio por perdida, debido a que fue sustraída del expediente criminal.
No fue sino hasta 2002 que esta pistola fue encontrada en la casa de un reportero que cubría el juicio de Saldívar. Fue entonces cuando un juez ordenó destruir este objeto.
Finalmente, el arma fue desensamblada para que no pudiera ser reconstruida y, por si fuera poco, arrojada a la bahía de Corpus Christi, donde yace en el fondo del mar.
GDM