Aunque María Félix es considerada una de las mujeres más bellas del Cine de Oro, existen otras guapas actrices que conquistaron la pantalla grande, como lo fue Martha Valdés, quien tenía los ojos más bellos de la época y las fotos lo comprueban.
Martha Valdés, también conocida como Martha Valdez, nació en la ciudad de Tijuana el 1 de enero de 1928. Trabajó en la década de los años cincuenta en algunas películas importantes, antes de desaparecer del ambiente artístico a finales de la década, un suceso que todavía causa intriga entre sus seguidores.
Cursó sus primeros estudios en Ensenada, Baja California, y también residió con su familia en Ciudad Juárez de donde fue enviada a los Estados Unidos y ahí terminó la secundaria y el bachillerato.
Posó para el club de fotógrafos de Ciudad Juárez y una de esas fotos llamó la atención del productor cinematográfico Gregorio Wallerstein, quien le dio sus primeros papeles en las películas "Nunca es tarde para amar" (1952) y "Las infieles" (1953), protagonizadas por Irasema Dilián, Rebeca Iturbide y la actriz María Douglas.
Su belleza llamó la atención de "Cantinflas"
Su bella mirada con ojos de color llamó la atención de Mario Moreno "Cantinflas", quien le dio un papel en la película "Caballero a la medida" (1954). Ese mismo año trabaja con Germán Valdés "Tin Tan", Joaquín Pardavé y Sara García en "El hombre inquieto", película en donde tiene una escena de antología al lado del cómico cuando este le lleva serenata al lado del trío Los Panchos.
Aunque algunos han rumorado que la bella actriz era pariente de "Tin Tan" por llevar el mismo apellido, los expertos de la época han desmentido la información, pues no existe ningún registro de que la pareja de actores haya tenido un lazo familiar.
En 1955 participó en la película "Espaldas mojadas" del director Alejandro Galindo, junto a David Silva, Víctor Parra y Eulalio González "Piporro". Luego llegaron a su carrera otras comedias como "Cómicos de la Legua" (1957) con Adalberto Martínez "Resortes", "El gato sin botas" (1957) y "Los tres mosqueteros y medio" (1957), de nuevo con Germán Valdés.
Otro género en el que incursionó fue el de aventuras con las películas como "El águila negra vs. los diablos de la pradera" (1958) y "El águila negra contra los enmascarados de la muerte" (1958).
Martha Valdés dejó de forma inesperada su carrera a finales de los años 50, después de casarse con el periodista Fernando Morales Ortiz, aunque nunca fue aclarado porque tomó la decisión de abandonar la vida en el Cine de Oro, aún cuando se encontraba en un buen momento.
Sus últimas películas las realizó al lado del que fuera su compañero en grandes producciones, Germán Valdés, con quien grabó "Las mil y una noches" (1958) y "Vagabundo y millonario" (1959). Falleció el 20 de noviembre de 2014, aunque durante muchos años no se supo de ella.
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