Diego Luna se enfrentó a una gran realidad al sacar “Pan y Circo”, por lo que previo a estrenar la segunda temporada de la serie dirigida por él, el actor se dio el tiempo de contar todo lo que tuvo que confrontar en la grabación de la primera y la segunda temporada, ya que asegura que se dio cuenta de muchos micromachismos de los que forma parte.
Previo al estreno de la segunda parte de su serie, Luna habló para los micrófonos de Infobae, donde abrió confesando que le dieron muchas ganas de pedir disculpas por la serie que le dio dos Premios Emmy. Se tiene que recordar que en la primera temporada se abordaron problemas sociales.
“Me confrontó con muchos micromachismos de los que yo participo. Mis dinámicas y mi actuar abonan a que vivamos en un país tan peligroso para las mujeres (…) En el nombre del humor, hay una violencia de género brutal y también con el racismo hay un sistema del que participas”, explicó el actor y director.
El reto de “Pan y Circo”
La serie dirigida por el mexicano busca seguir exponiendo la realidad a la que se enfrenta el mundo, en especial la comunidad latina y los patrones adoptados socialmente a lo largo de la historia, por lo que el reto es hacer que la gente termine de ver esas historias a pesar de no compartir muchas cosas que puedan ver.
“El gran reto, cada vez que me pongo a cocinar en estas escenas, es que nadie se levante y se vaya, se acaben la comida, que esté rica. Lo más importante es que se escuchen a pesar de no compartir los mismos puntos de vista”, explicó Luna.
Una dura realidad que hace crecer
Diego sabe que en Latinoamérica se vive una realidad bastante complicada socialmente, ya que se viven muchas luchas dentro de ella, pero a pesar de eso, no quiere que sus hijos dejen de ser curiosos y que conozcan la comunidad a la que pertenecen, la latina, ya que asegura que cuando conocen las historias de los demás terminas por crecer y aprender más de ti.
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