El circo del voto llega con un nuevo episodio y en esta ocasión, Diana Wong y Fer Gay nos cuentan cuáles son las funciones que tienen los diputados y senadores en el proceso legislativo, sin importar si se trata de legisladores federales o locales (en cada estado de la República).
Lo primero que se debe saber es cómo se conforma el Congreso de la Unión y es con la Cámara de diputados y la Cámara de Senadores. La función principal de la Cámara de diputados es elaborar leyes, hacer nombramientos de algunos puestos como los del INAI o el INE y de avalar el Presupuesto de egresos de la federación. Además, los diputados están en su cargo por tres años y se pueden reelegir hasta cuatro veces.
Sigue leyendo:
Participación Ciudadana: ¿por qué es importante salir a votar el 2 de junio?
En el caso de la Cámara de senadores, se eligen para su encargo por seis años y tienen la posibilidad de reelegirse en dos ocasiones. En este lado del proceso legislativo, los senadores también se encargan de elaborar leyes, pero tienen otras funciones como la ratificación de puestos.
FOTO: Archivo
El Congreso rumbo al 2024
En estos momentos de definición y con tantas fuerzas políticas, se vive un entorno de tensión y de confrontaciones constantes, porque algunos partidos o alianzas proponen leyes y reformas, pero hay otros que intentan bloquearlas para que no sean aceptadas.
Diputados: Son 500 diputados, 250 mujeres y 250 hombres
Senadores: Son 127, 63 hombres y 64 mujeres
En algunas ocasiones se alargan tanto las sesiones y llegan a altas horas de la madrugada, que más de un legislador ha sido sorprendido tomando una siesta en su curul, en su oficina o, de plano, en el piso del recinto federal.
FOTO: Archivo
Algunos conceptos que se escuchan en el Congreso
Fuero político: Es un número que se entrega a los servidores públicos y que tiene validez en toda la República Mexicana. Y se utiliza para
Mayoría simple: Algunas leyes, reformas o propuestas presidenciales necesitan del 50 por ciento + 1 para poder ser aceptadas
Mayoría calificada: En este caso es necesario tener dos terceras partes de los votos a favor, para que pueda ser aceptada la propuesta. Por ejemplo, en el caso de la reforma a la SCJN y la elección de los ministros, se necesita una mayoría calificada para que sea aprobada.