Arturo Carranza, analista del sector energético, señaló que el conflicto en la refinería Dos Bocas podría ser consecuencia del estrés y las malas condiciones laborales a las que están sometidos los obreros, quienes trabajan más de 10 horas diarias, son víctimas de cobros sindicales y condiciones irregulares.
En entrevista para Heraldo Radio en “Bitácora de negocios” con Mario Maldonado, dijo que a pesar de que el gobierno federal ha dicho que son entre 200 y 300 trabajadores de la refinería Dos Bocas los que protestaron, harían bien en dimensionar el problema, porque también se ha dicho que son más de 5 mil obreros los que habría protestado. "Si hubo un conflicto es porque hay algo mal ahí y se tiene que atender", detalló.
Lo anterior es porque la Secretaría de Energía y el mismo presidente Andrés Manuel López Obrador afirmaron que la refinería Dos Bocas estaría lista para julio de 2022, por lo que hay marchas forzadas para concluir el proyecto.
"Aunque la refinería sea inaugurada en julio de 2022, ésta empezaría a operar en condiciones óptimas hasta final del sexenio, pero se entiende que el gobierno federal impulse su obra emblema, cuyo costo es superior a los 8 mil millones de dólares", expresó.
Por otro lado, Carranza habló de la reforma eléctrica, la cual fue planteada por el gobierno federal, pero, dijo, no se platean mejoras o un ambiente propicio para construir un sistema de nivel nacional.
Consideró que en los próximos meses se vería una radicalización en las posturas, tanto del gobierno federal como del sector privado, pero lo mejor sería "concentrarse en las áreas de oportunidad, esto con el propósito de atraer inversiones para el país".