Tras una larga enfermedad respiratoria, el ganadero José Garfias de los Santos falleció ayer en San Luis Potosí, a los 79 años, y con su pérdida, se cierra un brillante capítulo para la cabaña brava mexicana, pues junto a sus hermanos Javier y Marco, fueron los responsables de una época de gloria para los toreros en los ruedos.
Don Pepe nació el 13 de junio de 1941. Influenciado por su hermano Javier, fundó el hierro de De Santiago en 1966, junto a Marco Antonio, en Villa de Arriaga en San Luis Potosí, con 80 vacas y dos sementales de Garfias, cuya sangre era el encaste de San Mateo-Llaguno.
Lidió por primera vez en Guadalajara ese mismo año, pero no fue sino hasta el 23 de agosto de 1970 que se presentó en la Plaza México, con seis novillos para Jaime Rivero El Húngaro, Adrián Romero – triunfador de esa tarde con el corte de dos orejas al astado “Bordador” y dio la vuelta al ruedo en compañía de los ganaderos– y cerró la tercia Joaquín Leal.
En 1976, Pepe y Marco se separan y el segundo de los hermanos se quedó con el hierro y los colores de la divisa. A partir de ahí, su éxito comenzó a ser notorio con triunfos en México y Sudamérica (Colombia y Venezuela), al criar un toro al que le gustaba a todos los matadores.
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“Creó una forma de embestir y una forma de concebir el toreo para sus animales. En lo personal para la familia Silveti, lo quisimos mucho. Él crió el toro soñado: con humillación, profundidad, con unas hechuras maravillosas, clase, ritmo, a muchos toreros les hizo cambiar sus carreras, colocarse en figuras”, dijo Diego Silveti.
El potosino también fundó otro hierro con su nombre y el de Santa Isabel, pero generalmente lidió como De Santiago. Con el pasar de los años ligó tardes triunfales en la Monumental Plaza México.
Su dehesa está colocada en el undécimo lugar con más rabos cortados –con cuatro– en el ruedo capitalino y logró uno más bajo la denominación de Pepe Garfias.
Uno de estos máximos trofeos, le permitió a Arturo Gilio ponerse en un lugar de figura del toreo. El 5 de febrero de 1992, le tumbó las orejas y el rabo al toro “Genovés”, en la tarde de su alternativa.
“Fue un toro que tuvo mucha calidad, mucha nobleza, tuvo bastante recorrido y movilidad, humillaba, transmitía y de muchos pases, y eso permitió que me compaginara con el tipo de toreo que traía dentro y tuviéramos una de las tardes más importantes con ese rabo, el 103 de la Plaza México”, dijo Gilio, hoy empresario y ganadero de toros de lidia.
Pero no todo es miel sobre hojuelas, ya que en los últimos años enfrentó problemas de índole agrario, que le causaron mucho daño. Le sobreviven su viuda, doña Isabel Montero, y sus tres hijos Pepe, Isabel y Santiago.
Los máximos trofeos a sus toros en la Plaza México
Rabo No. Fecha Torero Toro Hierro
98) 05/02/1984 Ricardo Sánchez “Capitán” De Santiago.
103) 05/02/1992 Arturo Gilio “Genovés” De Santiago.
106) 05/02/1995 “Niño de la Capea” “Piropo” José Garfias.
107) 26/03/1995 Miguel Espinosa “Armillita” “Vidriero” De Santiago.
109) 25/02/1996 José M. Arroyo “Joselito” “Valeroso” De Santiago.
OTRO TRIUNFO
Fermín Spínola indultó al burel “Vinatero” de De Santiago, la tarde del 2 de marzo de 2003, el cual fue el único en la carrera del ganadero potosino en la Plaza México.
DEBUT MAYOR
Don Pepe lidió una corrida de toros por primera ocasión en el ruedo capitalino el 9 de octubre de 1983, para Rafael Gil “Rafaelillo”, junto a Ernesto Belmont y la confirmación de Guillermo Capetillo.
GANADERÍA PARA FIGURAS
- Julián López “El Juli” confirmó su alternativa en el Coso de Insurgentes con “Torbellino”, de De Santiago, No. 58 y 514 kg.
- 1966 fundó su primer hierro.
- 55 años duró como ganadero.
- 5 Rabos logró en la Plaza México.
- 80 vacas comenzó su dehesa.
POR HÉCTOR JUÁREZ CEDILLO
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