María de los Remedios Varo Uranga nació el 16 de diciembre de 1908 en Anglés (Gerona), España. Hija de Rodrigo Varo y Zejalvo e Ignacia Uranga y Bergareche.
La profesión del padre, ingeniero hidráulico, hace viajar a la familia a través de toda España, desplazamientos que dejaron profunda huella en la pintora. Vivió en Marruecos y Madrid donde en la Residencia de Estudiantes compartió momentos con Federico García Lorca, Salvador Dalí y Luis Buñuel.
Logró destacar en el surrealismo, al darle su propio giro al movimiento, “Varo invocó la iconografía de una variedad de fuentes, alegorías renacentistas, el misticismo católico, el sufismo y la psicología junguiana”, explica la casa de subastas Sothebys.
La pintora española está considerada una artista de la alquimia, dedicada a hacer revivir mundos con una atmósfera de misticismo.
La obra de Remedios Varo la convierte en una de las mujeres artistas más célebres del mundo hispanoparlante, y una figura clave del arte de mediados del siglo XX.
En 1930 se casó con Gerardo Lizarraga, con la intención de salirse de casa. Se instalan en París durante un año, desplazándose después a Barcelona. Allí trabaja en la casa de publicidad Thompson y comienza a relacionarse con otros artistas de vanguardia, finalmente, se separa de Lizarraga, pero mantiene una entrañable amistad con él.
Remedios Varo en México
Tras un par de años en la capital francesa, Varo tuvo que huir debido a la Segunda Guerra Mundial. Llegó a México, donde pasó el resto de su vida. El cambio fue duro para la artista, la pintora Leonora Carrington fue de las pocas amigas que tenía en nuestro país.
Remedios Varo se valió de su talento para ganarse la vida, al incursionar en la ilustración publicitaria, diseño de interiores y restauración de cerámica precolombina.
En los años cincuenta se consagró y llegó éxito artístico, "creó una obra de gran narrativa y pureza. Un trabajo minucioso cargado de diversidad temática. Sus temas de interés iban desde la teoría psicoanalítica hasta la alquimia, tal como se expresa en múltiples cuadros suyos", explican el Arte y algo mas.
Añaden que el misticismo de sus pinturas estuvo influenciado por el psicoanálisis de Sigmund Freud, Carl Jung y Alfred Adler, como dejó plasmado en su obra "Mujer saliendo del psicoanalista".
Utilizó sus obras como un medio de denunciar la realidad de la mujer de la época, de desigualdad y sumisión, haciendo una crítica al sistema patriarcal. Otro de sus temas, es el de la mujer maga.
En el libro "Remedios Varo: El hilo invisible", la investigación mostró un aspecto esotérico de la pintora, con apoyo de arquitectos, psicoanalistas y alquimistas los autores (José Antonio Gil y Magnolia Rivera) hallaron conocimiento de esoterismo, tradiciones de Oriente y Occidente, metafísica, astrología y ciencia detrás de su obra.
Remedios Varo falleció de un infarto en 1963, a la edad de 54 años, "poniendo fin a una emocionante carrera. En su estudio estaba su último cuadro: Naturaleza muerta resucitando, y el boceto de un cuadro que llevaría el título de Música del bosque", de acuerdo con My modern Met.