La Basílica de Guadalupe es uno de los lugares más visitados por los católicos de todo el mundo, y también uno de los más representativos de la historia y la cultura de México. En esta ocasión se volvió tendencia luego de que en TikTok la cuenta The Slides Project (@theslidesproject) compartiera una serie de fotografías de cómo lucía este increíble lugar en 1952.
El origen de la Basílica de Guadalupe se remonta al siglo XVI, cuando según la tradición católica, la Virgen se apareció en cinco ocasiones al indígena Juan Diego en el cerro del Tepeyac, al norte de la Ciudad de México. La Virgen le pidió que le construyeran un templo en ese lugar, y como prueba de su veracidad, dejó su imagen impresa en el ayate o manta que llevaba Juan Diego. La primera edificación que se hizo en honor a la Virgen fue una ermita o capilla, que se terminó en 1531.
¿Cómo se veía la Basílica de Guadalupe a mediados del siglo XX?
En la Ciudad de México en 1952 se vivió una época de cambios y de avances, que sentaron las bases para el desarrollo posterior del país. La Basílica de Guadalupe fue testigo de estos acontecimientos, y también fue parte de ellos, al recibir a miles de visitantes que buscaban consuelo o esperanza en la Virgen morena. Las fotos fueron escaneadas y subidas por el perfil The Slides Project, el cual aseguró que el autor es desconocido.
Debido al crecimiento demográfico de la Ciudad de México y al hundimiento diferencial del suelo, provocado por la extracción de agua del subsuelo, la Antigua Basílica sufrió daños estructurales que pusieron en riesgo su estabilidad. Por eso, se decidió construir un nuevo templo, más amplio y moderno, que pudiera recibir a los millones de fieles que cada año llegan a visitar a la Virgen. Así nació la Nueva Basílica de Guadalupe, que se consagró el 12 de octubre de 1976.
¿Cómo luce en la actualidad la Basílica de Guadalupe
La Nueva Basílica tiene una forma circular, con un diámetro de 100 metros, que permite que todos los visitantes puedan ver la imagen de la Virgen desde cualquier punto del interior. Su diseño estuvo a cargo del arquitecto Pedro Ramírez Vázquez, quien también participó en la construcción del Estadio Azteca, el Museo Nacional de Antropología y el Museo del Templo Mayor.
La Nueva Basílica tiene una capacidad para 10 mil personas en su nave principal, pero puede aumentar si se toman en cuenta los demás niveles. Además, cuenta con un sistema hidráulico que le permite mantenerse nivelada ante los movimientos del suelo. La importancia de la Basílica de Guadalupe no solo radica en su valor arquitectónico o artístico, sino también en su valor religioso y cultural.
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