Quien diga que el amor es cosa de niños quizás se esté mintiendo a sí mismo, y es que las gran mayoría relaciones sentimentales son complejas, pues no solo basta el cariño para mantenerlas a flote, ya que con el paso del tiempo, pueden surgir discusiones, malentendidos y otro tipo de problemas que desgastan la conexión.
A veces estos conflictos escalan tanto, que alcanzan un punto en el que ambos involucrados se encuentran tan mal y con tanto estrés acumulado, que se convierte en una relación tóxica de la cual se derivan actitudes y comportamientos que ponen en riesgo la salud física, psicológica y emocional de los involucrados.
Pero muchas veces no notamos -o no queremos notar- que estamos envueltos en una relación tóxica, por ello aquí te dejamos algunas señales de que estás en una de ellas y cómo hacer para salir de ahí.
Te podría interesar: ¿Cuántas mentiras decimos al día? La ciencia revea porqué las decimos y qué pasa cuando lo hacemos
¿Qué es una relación tóxica?
De acuerdo con expertos en psicología, las relaciones tóxicas son aquellas en las que las partes involucradas son incapaces de tratarse con respeto y básicamente buscan nuevas formas de hacerse daño mutuamente. Cabe aclarar que estas no solo se dan entre parejas, sino también con amigos, compañeros de trabajo e incluso familiares.
Según los investigadores, una relación se vuelve tóxica en el momento en el que una de las partes se aprovecha de la otra para beneficio propio; es decir, cuando existen juicios, manipulaciones, amenazas o maltratos para tener el control completo sobre diversas situaciones.
Pero ojo, estos no son los únicos síntomas o señales de que estás en una relación tóxica, y es que, según el psicólogo Frederic Skinner, algunas de las más comunes son:
- Reproches y discusiones acumuladas o constantes
- Falta de empatía
- Celos
- Envidia
- Miedo a ‘romper’ o estar solo
VIDEO
¿Por qué siempre busco relaciones tóxicas?
De acuerdo con investigadores, miles de personas a nivel mundial se sienten atraídas a las relaciones tóxicas debido a que son una especie de adicción. Sí, tal como si fuera una droga, y es que, existe un mecanismo cerebral llamado sistema de recompensa, el cual se encarga de controlas nuestras sensaciones de placer y se activa ante todos los estímulos que nos generan placer.
Cuando se trata de dependencia emocional, cuando recibimos alguna recompensa de una persona, aunque nos trate mal, solo nos enganchamos por las cosas que nos hacen sentir bien, por lo que dejamos de lado todo lo que nos hace daño. Si se repite este patrón, es difícil que salgamos de una relación tóxica, pues nuestra autoestima baja y buscamos llenar vacíos a como dé lugar.
Debido a esto, es bastante común que las personas caigan una y otra vez en relaciones tóxicas que no les hacen ningún bien.
Te podría interesar: ¿Es malo masturbarse? Mitos y realidades de esta práctica sexual
¿Cómo salgo de una relación tóxica?
Tal vez la respuesta parezca obvia; salir de ahí y no mirar hacia atrás. Pero ojo, debes seguir una serie de pasos que te ayudarán a tomar la mejor decisión.
- Toma consciencia: Es probable que tus amigos o familia ya te hayan dicho que tu relación es tóxica, pero si aún no caes en cuenta de ello, tómate un momento para analizar en qué punto de tu vida te encuentras.
- Piensa en ti: Primero tú y después el otro. Analiza si estás haciendo algo mal y qué puedes cambiar para mejorar tu relación.
- Dialoga: Una vez que hayas pensado en ti, platica con tu pareja y hazle saber lo que sientes; si pueden llegar a un acuerdo, es momento de ajustar y hacer algunos cambios.
- Toma una decisión: Sin con el paso del tiempo no ves ningún avance, es mejor decir adiós, antes de que exista un problema mayor.