Pues sí, mi querido lector, aparte de contar calorías, carbohidratos, macros y micros, ahora también tendremos que fijarnos qué consumimos en los medios de información y redes sociales.
Al igual que los alimentos, lo que vemos y escuchamos en televisión, radio e internet afecta a nuestra salud física, mental y emocional. México es el país número uno en obesidad infantil, no queremos ser el número uno en obesidad mediática. La hiperconectividad de hoy, en donde en todo momento estamos recibiendo información por diversas vías, y no necesariamente comunicación veraz, está haciendo, al igual que el exceso de comida chatarra, una sociedad obesa mediáticamente. Y al igual que se trata clínicamente el problema del sobrepeso, debe tratarse la sobre información, con el cambio de hábitos. Aquí sí aplica la famosa frase: “Menos es más”.
Lo más importante es encontrar un balance, y quizá lo más difícil, para lo cual es necesario hacer una planeación semanal. Lugares y horarios en donde no uses ningún tipo de dispositivo o medio de comunicación. Pueden ser las horas de las comidas. Las habitaciones. Pero ni si quiera metas los aparatos. En un principio será difícil, pero verás que poco a poco se te hará un hábito. Ponte horarios estrictos y apégate a ellos.
Escoge dos o máximo tres redes sociales que seguir, y distribuye tu tiempo total entre todas ellas.
Haz una limpieza profunda en tus redes sociales. Quién ocupa tu espacio. Por ejemplo, en Instagram. ¿A quién sigues? La información que comparte, ¿aporta algo a tu vida? ¿O te quita paz? ¿Energía? ¿O te da igual? Debes seguir cuentas, o de seres que conozcas y quieras, o cuentas que te nutran, te aporten sabiduría, paz mental, entretenimiento sano y/o información veraz.
Recuerda que no estamos hechos para ser multitaskers, en cualquier momento que estés en redes sociales, estás desatendiendo otras cosas. El regalo de tu presencia completa, de tu atención sin división, es lo mejor que puedes darle a alguien.
Si es necesario haz un detox. A veces sirve ausentarse por algún tiempo. Obviamente hoy no puedes estar desconectado al 100, pero sí puedes borrar tus redes sociales por un determinado tiempo y ver si te sientes mejor, si baja tu ansiedad, si mejora tu productividad. Tal vez así te das cuenta de que no necesitas pasar tanto tiempo en ellas. Si lo haces con algún amigo puede que sea más fácil. Identifica cuáles apps son las que más te causan adicción y esas evítalas. Pon una liga en tu teléfono para recordarte física y visualmente este pacto que hiciste contigo mismo, para que cada que lo quieras agarrar te lo recuerde.
Cualquier cosa, información o relación que atente contra tu paz mental es un capricho millonario del cual debes prescindir.
Haz un détox
- Borra de tus redes sociales, por un determinado tiempo, cuentas que no aporten nada, que no te generen paz.
- Identifica cuáles son las aplicaciones que más te crean adicción, y evítalas el mayor tiempo que puedas.
- Puedes poner una liga en tu teléfono para recordarte física y visualmente el pacto que haz hecho contigo mismo.
- Cualquier cosa, información o relación que atente contra tu paz mental es algo que debes evitar.
Por Brenda Jaet
Ilustración: Erik González
MAAZ