Después de la elección del 2 de junio en la que a nivel federal el Frente Fuerza y Corazón por México obtuvo resultados muy lamentables, el cuestionamiento es ¿Qué pasa en los Partidos Políticos? y es simple, tanto el PRI, el PAN y el PRD en lo nacional carecen de liderazgos legítimos que puedan representar a la ciudadanía.
Tristemente utilizaron a su candidata Xóchitl Gálvez como un perfil para administrar la derrota y acomodar a sus perfiles más cercanos en las cámaras para garantizar 6 años más de cargo público y tal vez, más tiempo de control en sus partidos, el PRD y Jesús Zambrano quedan fuera de esta ecuación pues perdió el registro y no entro como plurinominal al Senado.
Pero sin duda, los ganadores de la elección no fueron el PRI y el PAN, fueron Alejandro Moreno y Marko Cortés, que garantizaron un asiento en el Senado para ellos y sus cercanos, así como en Cámara de Diputados, y ahora tienen en frente el reto de la renovación de sus dirigencias y porque no, de los partidos como tal.
Aunque “Alito” Moreno y Marko Cortés parece que seguirán en el control de sus partidos, en el PRI existe la posibilidad de que “Alito” Moreno por segunda ocasión amplie su mandato modificando estatutos, lo cual puede hacer sin problema alguno, ya que tiene el control del Consejo Político Nacional, pero qué dirán personajes como Beatriz Paredes, Manlio Fabio Beltrones u otros ex dirigentes nacionales que fueron respetuosos con los tiempos, eso al parecer a Alito no le importa y tal vez el Partido tampoco pues en esta ocasión tuvieron los resultados más pobres de los últimos años.
¿Cuánto ha perdido el PRI desde la llegada de Alito Moreno a la dirigencia? Comparando la elección de 2012 cuando gana Enrique Peña Nieto, el PRI obtuvo 16’231,456 votos y en 2024 con Xóchitl Gálvez solamente 5’736,759 votos es decir, cerca del 60% menos de votos. De igual manera, si comparamos con 2018, cuando el candidato fue José Antonio Meade, obtuvo 7’677,180 votos, es decir, 13.56% del total de los votos y ahora en 2024 con Xóchitl Gálvez cae casi 2 millones de votos, una reducción del 25% aproximadamente.
También podemos hacer la comparación con los resultados en la Cámara de Diputados, que en 2018 obtuvo 9’310,523 votos, es decir el 16.53% de los votos, cifra que en 2021 disminuyó a 8’715,899 votos y ahora en 2024 solamente obtuvieron 6’574,223 votos, únicamente el 11.11% de los votos.
Igualmente en el Senado de la República, en 2018 el PRI obtuvo 9’013,658 votos y en 2024 solamente 6’530,305 votos, es decir, cerca de un 25% menos. Pasa lo mismo en las gubernaturas, en 2019 cuando Alito Moreno llega como dirigente del PRI, su Partido gobernaba solo o en alianza 12 estados y hoy solo gobierna 2, pero no todo es culpa de Alejandro Moreno, es culpa de ex gobernadores que por su tranquilidad entregaron sus estados y prefirieron irse de embajadores, como el caso de Claudia Pavlovich en Sonora o Quirino Ordaz en Sinaloa, del único estado que tal vez se puede responsabilizar Alito es Campeche, pero ahí también el gobernador interino le dio la espalda y traicionó al PRI, entregando su estado.
Sin duda, un descalabro fuerte fue la pérdida del Estado de México, por los antecedentes que se tenían en el estado, Alfredo del Mazo jugó sus cartas para vivir tranquilo y ahora meses después vemos que Alejandra del Moral renuncia al PRI y se suma a Morena, que quiero decir con esto, que ciertamente Alejandro Moreno se ha equivocado, pero con ex gobernadores como Pavlovich, Ordaz, Murat, del Mazo, no se podía hacer mucho para llevar al PRI a buen puerto.
Por su parte, Marko Cortés será Senador, tendrá un buen sueldo, posiblemente si llega Jorge Romero seguirá controlando el PAN, pero podemos decir que las únicas notas que ha dado Marko Cortés como dirigente fue cuando público el acuerdo de los repartos en Coahuila y el hecho lamentable de reclamar y gritar a Xóchitl Gálvez el día de la elección.
Sin duda, los Partidos tienen que reinventarse, pero no solo es la marca, son los políticos y sus acciones las que tienen que cambiar, si Alejandro se llama Marko o Marko se llama Alejandro y el PRI cambia al PNR o el PAN cambia a Partido del Bajío no pasará nada, lo que tienen que cambiar es la forma de operar, la forma de llegar a las personas, la forma de hacer política, porque mientras sigan buscando un cargo y protegiendo a sus cercanos, tal vez Morena siga ganando elecciones de forma aplastante, a pesar de Marko y a pesar de Alito.
José Alfredo Ceja Rodríguez.
Académico Universidad Panamericana.
@alfredocejar