Desde hace mucho tiempo, la discusión más mediática en el último trimestre de cada año de la política nacional ha sido, la conformación del Presupuesto Público de la Federación para el año siguiente. Esta arena de discusión no es un tema menor, debido a su trascendencia e importancia en el acontecer de la vida pública nacional. Al respecto, muchos son los rumores y especulaciones que acompañan su estudio y análisis.
En el último tramo de este 2024, que está por concluir, convendría tener en consideración que el ambiente circundante a esta importante iniciativa, si bien, no está enrarecido por un clima de incertidumbre como en otros años, factores como la reforma judicial y la inseguridad pueden ser componentes sustanciales para inhibir el nivel de inversión extranjera y nacional, indispensables en proyectos de infraestructura para acrecentar el PIB mexicano.
En medio de este contexto, la elucubración de nuevas fórmulas de recuperación fiscal progresivas es un proceso inaplazable para el adecuado rendimiento de la economía nacional. Por lo anterior, es en momentos como los que se avecinan (donde existe la necesidad de incrementar la inversión pública como una palanca propulsora y confiable para el crecimiento económico nacional), que se requieren urgentemente acrecentar los métodos en la captación de recursos en beneficio de la federación y su carga tributaria.
Al respecto el documento presentado recientemente por el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), la Fundación Friedrich Ebert, Fundar, Centro de Análisis e Investigación, el Instituto de Estudios Sobre Desigualdad (Indesig), México Evalúa, Oxfam México y el Programa Universitario de Estudios de Desarrollo (PUED) de la UNAM, titulado: “Propuestas de Reforma al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas”, es una aportación útil y productiva que abona de manera ingeniosa y científica a una discusión a la cuál,
México ha llegado tarde (con base en la evidencia internacional y regional), pero que necesariamente, debe abordar de manera inmediata para tratar de subsanar sus enormes vacíos recaudatorios en su base fiscal; todo ello, con la finalidad de encarar de mejor forma, los retos que afrontará en el horizonte inmediato, relativos a la atracción de nuevas inversiones procedentes del extranjero y también en el contexto local.
Y es que, de acuerdo con datos del Banco Mundial, Bahamas recauda el 16% de su Producto Interno Bruto (PIB), mientras que México solo el 13%. Un hecho lacerante e increíble. Es por ello, que existe un consenso cada vez más sólido, sobre la urgencia de incrementar los impuestos. Lo que no existe, es un acuerdo sobre cómo hacerlo. Por lo tanto, esta es la perfecta oportunidad para diagramar de mejor manera, un mecanismo gradual y progresivo, que facilite cobrarle a los que más ganan y reducir de igual forma, los mecanismos de evasión, exención o excepción fiscal con la que muchos grupos de la sociedad nacional pueden acceder actualmente y beneficiarse de esta clase de beneficios.
El documento de la Alianza de organizaciones educativas propone una propuesta al dilema en el que los investigadores Ana María Morales e Iván Benumea, del Centro de Análisis e Investigación Fundar, plantean una propuesta concreta para incrementar la recaudación de México, sin afectar a las personas de ingresos medios o contribuyentes cautivos. De llevarse a cabo, los expertos estiman que posiblemente podría lograrse la recaudación hasta en 2.5 puntos porcentuales el PIB.
La propuesta puede identificarse en tres partes:
1. Aumentar gradualmente la tasa del impuesto sobre la renta (ISR), el cual pagan las personas que ganan más de 183 mil pesos brutos al mes. Por lo que la tasa máxima pasaría de 35% a 42% aplicándoles a las personas que ganan más de 376 mil pesos brutos al mes.
2. Se propone que quienes cuenten con ingresos brutos mensualmente mayores a 183 mil pesos, no puedan ser sujetos de exenciones, deducciones y facilidades administrativas. Además, se sugiere que todos los beneficios fiscales permitidos por las autoridades mexicanas tengan una cláusula de vencimiento, es decir, que lo coyuntural, no termine siendo una ley o hábito, sino que pueda ser revisada, analizada y en su caso, modificada de ser necesario, si así, se requiriese en un futuro.
3. Se expresa modificar las tasas de ISR, para que las ganancias procedentes de ventas de inmuebles sean hasta cuatro veces mayores que las que actualmente suceden. Además, se plantea que la tasa por venta de acciones aumente de 10% a niveles más similares a los que se presentan en: Brasil donde es del 22.5% o Chile donde llega a ser del 40%.
Adicional a los puntos anteriores, el documento también esboza implementar un impuesto para todas las herencias que tengan un valor superior a los 8 millones de pesos, iniciando en un rango del 10%, e incrementar la tasa de forma escalonada hasta el 35%. Cabe destacar que este impuesto, ya existe en muchos países, incluidos: Argentina, Brasil, Chile, Ecuador, Bolivia, República Dominicana, y Colombia, países en vías de desarrollo como México.
Una observación que el grupo de expertos ha referido en el citado documento, es que, aunque es cierto que se está proponiendo una reforma fiscal más progresiva; al mismo tiempo la implementación de la tasa más alta es para las personas más ricas que no están pagando la proporción justa de acuerdo con su nivel de ingresos y patrimonio.
Por último, en este mismo estudio, se expuso que la propuesta fortalecería la capacidad administrativa de los gobiernos locales para que cobren de una mejor forma el predial, la cuál es una facultad de los municipios.
Una recaudación más eficiente es muy importante debido a que, la agenda de la Dra. Claudia Sheinbaum es enormemente ambiciosa en términos de inversión en infraestructura, programas sociales, e innovación tecnológica. Lograrla requiere más recursos de los que tiene el Estado mexicano actualmente, sobre todo, por la presión que existe en materia pensionaria en el mediano plazo.
Por lo que, una reforma fiscal como la que plantea la Alianza por la Justicia Fiscal tiene la bondad de recaudar más recursos y hacerlo solamente grabando a los más ricos. Esta iniciativa sumada al Plan Maestro de Fiscalización 2024 anunciado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público hace unos meses podría dinamizar por completo el sistema fiscal nacional y asegurar mejores condiciones de desarrollo a la mayoría de mexicanos.
México aún tiene margen adicional para elevar la captación de ingresos tributarios en al menos 3 puntos porcentuales del Producto Interno Bruto (PIB), aseguró este martes Gabriel Yorio, subsecretario de Hacienda.
Para ello, dijo que se debe seguir con una estrategia basada en inteligencia fiscal-financiera que aumente la eficiencia recaudatoria, sin embargo, la suma de ambas iniciativas podría darle a México entre 5 y 7 puntos del PIB. Un mayor margen de beneficios económicos a la actual administración para cumplir en tiempo y forma con los compromisos en su agenda de gobierno para los años venideros.
POR LUIS MIGUEL MARTÍNEZ ANZURES
PRESIDENTE DEL INAP
@DRLMMA56
MAAZ