La semana pasada se encendieron los focos rojos y de alarma para el sector ganadero y las autoridades sanitarias del país. Le cuento:
Resulta que, durante las labores de inspección y revisión fitozoosanitaria que se llevan a cabo en la Aduana Dos Bocas, en Catazajá, Chiapas, veterinarios detectaron un animal con miasis, una enfermedad parasitaria ocasionada por larvas de mosca que afecta tejidos y órganos. Al tomar una muestra y practicarle pruebas de laboratorio, se comprobó que era Cochliomyia hominivorax, comúnmente llamado Gusano Barrenador del Ganado.
Es importante destacar que México había erradicado esta enfermedad desde 1991, incluso, no había presencia de ella desde Norteamérica hasta el tapón del Darién, gracias a los esfuerzos de las autoridades sanitarias de los países de la región.
Sin embargo, en el verano de 2023, Panamá detectó un repunte de infestaciones en animales, a menos de 300 kilómetros de su frontera con Costa Rica, lo que marcó el inicio de la reaparición de este gusano en Centroamérica.
A partir de esa fecha, comenzó a expandirse por la región, gracias al tráfico ilegal de ganado. Tan sólo en 2022 se estima que habrían entrado más de 800 mil reses a México ilegalmente.
Fue en octubre cuando Guatemala reportó el primer caso, por lo que era cuestión de semanas para que el gusano llegara a suelo nacional.
El pasado domingo, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural emitió un comunicado donde anunciaba que se había encontrado un animal infectado en el Punto de Verificación e Inspección Federal ubicado en Catazajá, en un cargamento procedente de Centroamérica.
De inmediato, y como medida precautoria, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, en inglés) pausó temporalmente la internación de ganado mexicano a su país.
De no tomarse medidas inmediatas y acuerdos entre los gobiernos de México y Estados Unidos para evitar la propagación del gusano, será un duro golpe para el sector ganadero mexicano, una actividad que ya había sido severamente afectada en los últimos años por la sequía y la falta de apoyos por parte del gobierno del expresidente Andrés Manuel López Obrador.
Extraña el silencio del coordinador general de Ganadería de la Sader y la declaración de la presidenta Claudia Sheinbaum quien, al ser cuestionada sobre el cierre de la frontera por parte de Estados Unidos, con mucha seguridad dijo antier que esta misma semana se resolvía el tema.
De acuerdo con el presidente de la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas, Homero García de la Llata, el comercio internacional de ganado bovino en pie supera los 3,000 millones de dólares al año. El sector ganadero ocupa el tercer lugar en exportaciones agroalimentarias, solo detrás de la cerveza y el tequila-mezcal. De ahí el tamaño del problema que se vendría encima.
En contraste, vale la pena destacar la actuación del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), un organismo que es necesario reforzar en términos de andamiaje jurídico y de presupuesto. México no debe escatimar ni un solo centavo en sanidad.
Mariana Otero Briz
Colaboradora
@Brizcocho
MAAZ
