Ecos de la Ciudad

Javier López Casarín, alcalde de la seguridad

López Casarín se ha planteado un modelo que busca ser referente en la Ciudad de México, potenciando las capacidades de la alcaldía en un esfuerzo conjunto tanto con sus homólogos de las cinco demarcaciones colindantes

Javier López Casarín, alcalde de la seguridad
Humberto Morgan Colón / Ecos de la ciudad / Opinión El Heraldo de México Foto: Heraldo de México

No hay duda que uno de los temas de mayor preocupación para los ciudadanos es el de la seguridad. Por ello, desde el inicio de las pasadas campañas electorales, los postulantes a los espacios de representación popular plantearon compromisos precisos para inhibir la delincuencia y lograr la tranquilidad de sus vecinos.

Es el caso del alcalde de Álvaro Obregón, Javier López Casarín, quien concibió su propuesta de Seguridad, como uno de sus tres ejes de Gobierno. Los otros dos, son la construcción de una Alcaldía Modelo y la implementación de un Plan de Servicios de Calidad por Colonia.

Desde el primer día de su campaña, escuchó las denuncias de las y los obregonenses con respecto a los severos problemas con los altos índices de consumo de sustancias en menores, la violencia creciente en diversas zonas y los problemas de movilidad, especialmente en las áreas altas, donde la orografía dificulta tanto la acción policial como el acceso a los servicios de emergencia.

Ya en ejercicio de sus facultades como alcalde, constató la falta de infraestructura adecuada. Por ejemplo, que de las tres mil 400 cámaras de vigilancia existentes, solo 450 de ellas estaban en operación al inicio de su gestión.

De igual manera, las patrullas disponibles eran insuficientes, con solo 35 en funcionamiento, cuando el total contratado, por lo menos en papel, era de 113.

Con tales deficiencias, hace unos días, dio a conocer su Plan Integral de Seguridad o Estrategia 360, que comprende el uso de tecnología de última generación, así como la coordinación con la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la CDMX, el C5, la Fiscalía de Justicia capitalina y una permanente comunicación con los distintos sectores sociales de la demarcación. Además de la vinculación con las instancias de seguridad federal.

El Plan se sustenta en siete ejes fundamentales: Organización comunitaria; Capital humano; Colaboración interinstitucional; Análisis territorial; Tecnologías de la información; Equipamiento tecnológico y la Creación de un nuevo Centro Avanzado de Inteligencia (CAI).

Donde el CAI se perfila como el núcleo operativo del sistema, siendo un centro de monitoreo y análisis que permitirá perfeccionar la atención a los incidentes, coordinar mejor las respuestas de las autoridades locales y garantizar que las operaciones de seguridad sean más eficientes.

El centro será vital para la reactivación de las cámaras de vigilancia, la modernización de los servidores y el fortalecimiento del sistema de monitoreo que servirá como base para la toma de decisiones.

López Casarín se ha planteado un modelo que busca ser referente en la Ciudad de México, potenciando las capacidades de la alcaldía en un esfuerzo conjunto tanto con sus homólogos de las cinco demarcaciones colindantes. A saber, Cuajimalpa, Miguel Hidalgo, Benito Juárez, Coyoacán y Magdalena Contreras y con el acompañamiento de las autoridades estatales y federales.    

Para lograr el objetivo, también contará con la asesoría de reconocidos expertos, como William Bratton, exjefe de la policía de Nueva York, de Los Ángeles y de Boston, quien brindará sus servicios como asesor externo, a partir de un fideicomiso solventado por la iniciativa privada que posee empresas y diversas actividades económicas y productivas en la jurisdicción.

Con la intención de materializar su estrategia, anunció una primera inversión de 500 millones de pesos en materia de seguridad, con lo que se habilitará un C4 en las instalaciones que actualmente ocupa la Base Plata. Pero como dejó claro, el corazón de este proyecto será el Centro Avanzado de Inteligencia (CAI), donde se construirá una sala funcional y moderna para atender crisis.

En la presentación de tan interesante plan, el alcalde obregonense se hizo acompañar del Secretario de Seguridad Ciudadana, Pablo Vázquez Camacho, y del encargado de despacho de la Fiscalía de la ciudad, Ulises Lara, además de otras personalidades que garantizan la interacción y cooperación en la materia.

Algo verdaderamente relevante a destacar, fue su aseveración con respecto a que la seguridad no solo se obtiene con más policías, sino que se necesita recuperar el tejido social, fomentando valores como el respeto y la empatía, además de trabajar en colaboración con los ciudadanos. Lo que debe llevarnos a hacer un esfuerzo colectivo, que inicie desde la prevención.

Con la integración de tecnología avanzada, la colaboración interinstitucional y la participación activa de la ciudadanía, Javier López Casarín es el funcionario con más herramientas para convertirse en el verdadero Alcalde de la Seguridad.

Al tiempo…  

POR HUMBERTO MORGAN COLÓN

COLABORADOR

@HUMBERTO_MORGAN

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