Este lunes 28 de octubre tendrá lugar la asamblea general de asociados del Comité Olímpico Mexicano (COM), donde su actual presidenta, María José Alcalá, será electa para cumplir un periodo de cuatro años. Esto significa que con ella tendrá que trabajar el director de la Conade, Rommel Pacheco, rumbo a los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028 y en todas las competencias internacionales del ciclo olímpico.
Se espera que en virtud de que ambos fueron clavadistas y estuvieron en la selección nacional durante muchos años, que después coincidieron como diputados en la Comisión del Deporte de la LXV Legislatura y ahora son los máximos dirigentes del deporte de México, construyan una relación cercana y positiva, sin pleitos, sin diferencias y sin meterse el pie; sin embargo, hay un tema que puede convertirse en la manzana de la discordia y es el de las federaciones nacionales que están en conflicto.
Tres de ellas, las más visibles, son la de natación, la de tiro con arco y la de ciclismo cuyos problemas han impactado directamente en los deportistas. ¿Qué hará el director de la Conade? ¿Escuchar las razones de María José Alcalá sobre cuál debe ser el destino de los tres hombres que hoy están aferrados a no dejar, o bien, a apoderarse de la silla de presidente? O, por el contrario,
Pacheco escuchará el canto de las sirenas de Kiril Todorov, Gabriel Ramos y Luis Gerardo Langarica y decidirá reconocerlos, lo cual caería como un balde de agua fría a Alcalá, quien no está dispuesta a reconocerlos, ni trabajar de la mano con ellos, porque representan la presencia y abusos de Ana Guevara.
La semana pasada Rommel Pacheco estuvo en Lausana, sede del Comité Olímpico Internacional y de las federaciones internacionales; es decir, antes de haberse reunido con la propia María José, el director de la Conade viajó para hacer migas, o quizá algo más, con los poderosos del deporte federado.
En el caso de la federación de natación y de la de ciclismo sus homólogas internacionales, la World Aquatics y la UCI, respectivamente, no reconocen a las mexicanas. En el caso de la World Archery sí avala al nuevo organismo mexicano y a su presidente.
Al final de cuentas las federaciones mexicanas son una parte muy importante del COM que no está dispuesto a tolerar que personas non gratas para sus miembros participen en sus asambleas o en la toma de decisiones o, peor, funjan como caballos de Troya y representen intereses externos que siempre han tratado de apoderarse del COM.
Alcalá no tiene un pelo de tonta, sabe que cuenta con el respaldo de Olegario Vázquez Raña y sabe también que el poder se ostenta para ejercerse. Quizá un poco tarde, pero el sábado 26, por fin, Pacheco se reunió con Alcalá y ambos mandaron un mensaje de unidad en pro del deporte. Ya veremos,
POR BEATRIZ PEREYRA
COLABORADORA
@BEATRIZAPEREYRA
MAAZ