En la actualidad, la educación desempeña un papel fundamental en el desarrollo de cualquier país. Una educación de calidad es clave para formar ciudadanos competentes, impulsar el crecimiento económico y promover la igualdad de oportunidades. En la más reciente edición del Monitor Global de Educación de Ipsos encontramos opiniones divididas: 33% de la población de 29 países consideran sus sistemas educativos como buenos mientras que un 39% lo califica como deficiente. Hoy existen modelos educativos exitosos en el mundo como el de Singapur donde el 74% lo considera como bueno y coincide la percepción con los puntajes de la prueba PISA. En el caso de México, es necesario reconocer la importancia de transformar el sistema educativo para garantizar un futuro próspero para todos sus ciudadanos y la población reconoce estas oportunidades con solo el 26% calificándolo como bueno.
Para nadie es sorpresa que el sistema educativo en México ha enfrentado diversos desafíos a lo largo de los años. Desde la falta de acceso a la educación, la brecha de calidad entre las instituciones y la desigualdad en el aprendizaje (32%), hasta la falta de una currículo actualizado y relevante (35%), son solo algunos de los problemas que deben ser abordados de manera urgente.
Uno de los principales retos es mejorar la infraestructura educativa en todo el país y el 31% de los entrevistados lo reconoce. Muchas escuelas en México carecen de los recursos necesarios para ofrecer un entorno de aprendizaje adecuado. Es fundamental que se destinen mayores inversiones en la construcción y renovación de escuelas, así como en la adquisición de materiales y tecnología educativa. Además, se deben implementar programas de capacitación para los docentes, para que estén preparados para enfrentar los desafíos que impone el futuro. A nivel global, el 25% de los entrevistados considera que el profesorado está formado inadecuadamente, mientras que en México alcanzamos el 35% solo superados por Perú y Turquía.
Otro aspecto clave es reducir la desigualdad en el acceso a la educación. Aunque se ha avanzado en incrementar la cobertura educativa en el país, aún existen comunidades marginadas y rurales que no tienen acceso a una educación de mínima calidad. Es necesario implementar políticas y programas que garanticen el acceso equitativo a la educación, especialmente para aquellos grupos vulnerables como los niños indígenas, migrantes y con discapacidades.
Además de la infraestructura y el acceso, es fundamental revisar y actualizar el currículum educativo. La educación debe estar orientada hacia el desarrollo de habilidades y competencias necesarias en el mundo laboral actual. Se debe fomentar el pensamiento crítico, el trabajo en equipo, la creatividad y la resolución de problemas. Asimismo, se deben incorporar en el currículum temas relevantes como la educación financiera, la educación ambiental y la tecnología. La Inteligencia Artificial Generativa (como ChatGPT) presenta retos importantes para los modelos educativos mundiales y en México no se ha considerado su inclusión (o exclusión) dentro de las aulas. Como todo en este mundo de poli-crisis, las opiniones están divididas, pero nadie discute el impacto que tendrá en como nuestros jóvenes aprenden.
La transformación de la educación en México es de vital importancia para el país y hoy más que nunca se requiere la participación de todos los actores involucrados, incluyendo a los padres de familia, a la sociedad civil y al sector empresarial. La educación es responsabilidad de todos y requiere de un esfuerzo conjunto para lograr un cambio significativo. Solo a través de una educación sólida, actualizada y de calidad, México podrá alcanzar un futuro próspero y equitativo para todos sus ciudadanos.
POR FERNANDO ÁLVAREZ
SENIOR GROUP DIRECTOR
IPSOS EN MÉXICO
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