Hace tiempo que venimos escuchando el término “generación de cristal”, que se refiere a una supuesta fragilidad en los jóvenes. No sólo porque no aguantan (y no tienen por qué) “bromas” misóginas, raciales, homofóbicas, etc.; sino también, se les acusa de tener una crisis de identidad por defender pronombres o géneros. Créanme, los jóvenes no son el problema.
La crisis de identidad que estamos viviendo en esta época, con nuestros políticos mexicanos, es lo verdaderamente preocupante ¿Qué está pasando en el PRI y en el PAN? La alianza “Va Por México” quiere demostrar unidad entre la oposición, pero cómo podemos hablar de unidad cuando son sus propios militantes los que no sólo se bajan de la contienda interna presidencial por considerarla sucia, sino que renuncian a sus propios partidos, de los cuales algunos personajes han estado militando por más de 30 años.
Los dirigentes nacionales del PAN, Marko Cortés Mendoza; PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, y PRD, Jesús Zambrano Grijalva, con tal de mantener la permanencia al frente de sus respectivos partidos y obtener triunfos en los comicios, son capaces de traicionar sus creencias. Porque seamos sinceros ¿qué ideología tienen en común estos tres partidos? Ninguna. La misma Xóchitl Gálvez, quien ha sido desacreditada por la derecha por su formación en la Liga Obrera Marxista, quien dice que mantendría los programas sociales del presidente López Obrador (esos que tanto critican), se une y convive con personajes que no son acordes a la imagen que quiere vender.
En palabras del Senador de la República, Marco Antonio Gama Basarte “…he decidido renunciar a la militancia panista que he mantenido desde hace casi 30 años” “…el PAN ha sido expropiado en favor de una pandilla que lo utiliza para arrebatar su exclusivo beneficio e interés. Para desgracia de los militantes, el PAN ha perdido irremediablemente el rumbo. Está cautivo de intereses obscuros y mediocres, a quienes no les importa ser un partido, ni mucho menos construir una alternativa electoral capaz de hacer buenos gobiernos”. Su sentir se replica en varios exmilitantes panistas, quienes abandonaron las filas de Acción Nacional en estos últimos 2 años.
El caso del PRI es muy similar; Miguel Ángel Osorio Chong, en su mensaje de despedida dijo: “Hoy el PRI está extraviado, ausente, perdió la ruta y con una dirigencia soberbia que sólo se preocupa por construir incondicionales y alejarse totalmente de la militancia y de la sociedad. Sí, Alejandro Moreno, en poco tiempo, desvió a nuestro gran instituto político”. De 2020 a la fecha, prácticamente la mitad de sus militantes (más de 900 mil) han abandonado al tricolor por considerar que la unión PRI-PAN-PRD atenta contra la ideología del partido.
La verdadera generación de cristal no son los millennials y centennials, es la generación compuesta por la frágil representación de la oposición, con una crisis de identidad nunca antes vista, sin principios y carente de razón.
Por Claudia Lozano
Twitter: @clokslozano