Ha causado mucha extrañeza el comportamiento ético de la plataforma YouTube en México recientemente. Quienes están enterados de lo que ocurrió hace pocos días en un evento de esa empresa denominado “Brandcast” no pueden creer lo que atestiguaron. Describen que YouTube manipuló un estudio de Lab Panel, de Nielsen Ibope, para hacerse ver a sí mismos con mayor alcance que la televisión.
Este evento ocurrió en el Pepsi Center de la Ciudad de México. Al principio todo parecía bien porque se trataba de unos premios a ciertas marcas que se han anunciado en esa plataforma, como Cheez-It o la cerveza Corona.
No obstante, cuando se abordaron los datos de Nielsen se dijo que YouTube tiene un alcance 2.5 veces mayor al de los canales más vistos en México. La empresa se presentó en algo así como una especie de Santo Grial para los anunciantes en el futuro.
Evidentemente esto levantó la ceja de varios publicistas que conocen los datos reales, sobre todo porque los contenidos que más se ven en YouTube son los que produce la televisión abierta (incluidos por ejemplo los contenidos de la Liga MX, de lo que YouTube ni siquiera tiene los derechos). En pocas palabras: se puso el sombrero ajeno para las caravanas.
Este estudio de Nielsen era confidencial y no había autorización para exhibirlo al público como ocurrió en el evento. Se trataba de un análisis experimental que no permite comparación de consumos de contenido audiovisual lineal con digital.
Lo que es un hecho es que la televisión abierta tiene más del doble de alcance que esa plataforma digital y, si se suma la televisión de paga, la diferencia llega hasta cuatro veces.
El Instituto Federal de Telecomunicaciones ha establecido que a la TV abierta en México la ven 83 millones de personas, cifra muy superior a los 38 millones que ven YouTube.
Lo anterior ha detonado un debate respecto de la regulación que necesita legislarse y aprobarse para que toda la normatividad aplicable a la televisión también sea similar a la que aplique a las plataformas digitales, a fin de hacer comparable la oferta. Esto debería incluir transparentar la fiscalización de la publicidad e incluso la protección de datos personales.
Los expertos del sector señalan que en Europa y en Estados Unidos han quedado exhibidas estas manipulaciones por parte de ciertas plataformas digitales y se ha abierto paso a debatir una regulación que empareje a todo el sector bajo las mismas reglas.
SAMUEL
La gran inversión de cinco mil millones de dólares para Nuevo León anunciada por el gobernador Samuel García desde China, de parte de la empresa LGMG, cambiará la faz de la entidad. La empresa se enfoca en maquinaria, equipo de minería, ascensores, camiones de minería, plataformas aéreas, montacargas y similares. En noviembre inicia la construcción de sus instalaciones.
POR CARLOS MOTA
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