Es probable que, al igual que yo, en las últimas semanas hayas recibido algún mensaje en tu teléfono celular notificándote una oferta de empleo llamativa: posibilidad para trabajar desde casa, en una empresa de comercio electrónico de renombre y, además, con un salario diario sugerente.
Aunque no estemos en búsqueda de empleo e, incluso, no recordemos haber entregado nuestra información para solicitar alguna vacante es posible que nos sintamos tentados a dar clic al enlace que acompaña al mensaje para enterarnos de qué se trata esta oferta tan generosa o por qué la recibimos, pero ¡cuidado!, podemos estar ante un intento de phishing.
Y si tú querido lector, no has escuchado sobre el phishing, permíteme comentarte que es aquella estafa que tiene como objetivo obtener datos personales a través de internet. En este caso, el enlace que acompaña este tipo de mensajes puede llevarnos a sitios web sospechosos o redirigirnos a una ventana de chat en la aplicación WhatsApp, medios a través de los cuales buscarían obtener información nuestra y utilizarla para cometer fraudes u otro tipo de delitos.
Es un hecho que el uso de tecnologías de la información o TIC’s es cada vez mayor por parte de la sociedad mexicana. De acuerdo con datos de la ENDUTIH del INEGI, para 2020, el 91.8% de los usuarios de teléfono celular tenía un smartphone y el 72% de la población era usuaria de Internet. Y con el aumento en el uso de las tecnologías, lamentablemente los delitos cibernéticos crecen de manera paralela.
Por lo que te imaginarás querido lector, que recibir uno de estos mensajes no es el único riesgo que corremos.
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Otra estrategia que ilustra esta problemática es la denominada “montadeudas”, método de extorsión que ha cobrado auge en las últimas semanas y a través del cual se prometen préstamos de dinero exprés, a cambio de un pago inicial y acceso a fotografías y contactos del celular del solicitante, mediante los cuales realizan extorsiones en caso de que no se pague el préstamo –sin contar que los intereses se puedan volver impagables–.
De acuerdo con datos del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México, en lo que va del año se han registrado 5 mil 452 reportes bajo este esquema de “montadeudas”, 454% más respecto del año anterior.
Como vemos, las distintas modalidades de delitos o estafas a través de Internet están al orden del día y si bien como ciudadanía nos corresponde informarnos y estar atentos para no caer en estos posibles engaños, también es cierto que los esfuerzos y resultados en la atención de este problema por parte de las autoridades son urgentes: tanto por parte de los legisladores, operadores administrativos y jurisdiccionales.
Pues ante este crecimiento desbordado de ciberdelitos, resulta inminente impulsar legislación vanguardista en la materia, que persiga y sancione este tipo de conductas que, en ocasiones, por el anonimato de quien las comete, resultan difícil de perseguir.
La atención a esta problemática pasa también por la facilitación de los canales de denuncia, así como por el fortalecimiento de las policías cibernéticas y de los cuerpos que imparten justicia.
En un mundo de frenéticos avances tecnológicos, la legislación, las políticas públicas y la justicia no pueden quedarse atrás, de ahí la importancia de atender a tiempo el problema y evitar que se nos salga de las manos. Con ello, hagamos lo que nos corresponde.
Por: Laura Lizette Enríquez Rodríguez
Comisionada Ciudadana del INFOCDMX.
@lauraenriquez @InfoCdMex
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