El 6 de junio de hace un año, Quirino Ordaz Coppel vio tranquilamente cómo su partido, el PRI, perdía la elección del gobierno de Sinaloa —cargo que aún ostentaba— y daba paso a Morena, el partido en el poder.
Airada, la cúpula priista lo acusó de “traición”, de haber pactado con el gobierno la “entrega” del estado. El presidente Andrés Manuel López Obrador sonrió y le ofreció la Embajada de México en España.
El PRI amenazó a Quirino con expulsarlo del partido si aceptaba (lo mismo iba para el exgobernador campechano Carlos Aysa y la exgobernadora de Sonora, Claudia Pavlovich, quienes igualmente perdieron en esa misma fecha sus entidades —las ganó Morena— y AMLO les ofreció la embajada en la República Dominicana al primero, y el consulado de México en Barcelona, a la segunda). El sinaloense aceptó la embajada. Sus compañeros también. Los tres fueron expulsados del PRI “por indisciplina grave”.
Ayer 6 de junio, exactamente un año después de las elecciones en su estado —después de una larga y tortuosa espera por asperezas diplomáticas entre los gobiernos de México y España—, Ordaz Coppel presentó al rey Felipe VI sus cartas credenciales como embajador extraordinario y plenipotenciario de los Estados Unidos Mexicanos en el Reino de España.
Y ayer también, pero desde la mañanera en Palacio Nacional, López Obrador volvió a lanzar una puya semejante a la del año anterior. Adelantó que invitará a algunos de los gobernadores salientes a trabajar para su gobierno.
Seis fueron las entidades que tuvieron elecciones: Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas. Seis gobernadores dejarán el cargo, pero difícilmente algún panista será llamado. Saltaron los nombres del oaxaqueño Alejandro Murat y del hidalguense Omar Fayad. Priistas ambos que, al igual que sus compañeros de Sinaloa, Campeche y Sonora, perdieron sus estados a manos de Morena.
—¿De Oaxaca, de Hidalgo?, inquirieron los reporteros en el Salón Tesorería.
—Sí, poco, poco a poco. Tienen experiencia, pueden representar a México en otros países…; pueden ayudar aquí—, deslizó el Presidente.
—¿En una Secretaría?
—A un encargo importante, porque aquí no hay cargos, son encargos; o son cargos con encargo.
En los corrillos políticos se menciona desde hace tiempo la posibilidad de una embajada o un consulado para estos políticos. Pero para el oaxaqueño Alejandro Murat hay quienes avizoran una posición en la Secretaría de Comunicaciones, para supervisar esencialmente las obras del Transístmico.
Sea como sea, premio habrá para los priistas que perdieron frente a Morena. Y en el PRI, seguirán expulsando militantes.
•••
GEMAS: Obsequio de AMLO: “En estos dos años, ¡agárrense!, porque vamos a hacer mucho más, mucho más, mucho más”.
POR MARTHA ANAYA
MARTHAMERCEDESA@GMAIL.COM
@MARTHAANAYA
PAL