COMANDO Y CONTROL

Proyectos militares truncos

En la era moderna, las capacidades estratégicas de un Estado están dictadas por la cantidad y calidad de sus medios navales, aéreos, espaciales y cibernéticos

OPINIÓN

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Íñigo Guevara Moyano / Comando y Control / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

La seriedad de un Estado depende de su posibilidad para operacionalizar sus intenciones, por lo que la fuerza militar continúa siendo la principal herramienta.  

En la era moderna, las capacidades estratégicas de un Estado están dictadas por la cantidad y calidad de sus medios navales, aéreos, espaciales y cibernéticos. 

México ha mantenido un perfil muy bajo. Aunque ha invertido recursos sustanciales en proyectos que buscan dotarle de una capacidad real al Estado mexicano, la mayoría han quedado truncados por la inhabilidad de los gobiernos en turno a darle continuidad a proyectos de administraciones previas.

Ejemplo de esta situación fue la ausencia de recursos en la administración 2012-2018 para continuar con la expansión del Sistema Integral de Vigilancia Aérea (SIVA), que había iniciado su predecesor y buscaba expandir la cobertura radar del espacio aéreo nacional de 32% a 72%. Tras invertir en una nueva infraestructura de mando y control, así como la compra de cuatro radares 3D
–instalados en el sureste– en el sexenio 2006-2012, el SIVA requería cinco radares para el noroeste del país para 2018.  Pero no llegaron.    

Otro ejemplo es la negligencia de la administración actual para seguir con la construcción de buques de patrulla oceánica de largo alcance, materializada en el sexenio 2012-2018; tras haber invertido más de 20 mmdp en crear la infraestructura para que el Astillero de Marina No.20 en Salina Cruz, Oaxaca, construyera uno de los buques más modernos del mundo, este proyecto está en pausa tras la entrega de sólo una de las ocho fragatas planeadas.    

El resultado de estas inacciones son capacidades simbólicas, de desfile, regionales en vez de nacionales y definitivamente frágiles, por el alto costo que merece mantener en servicio piezas únicas.  

De otra forma, establecer un SIVA nacional permitiría no sólo la vigilancia del espacio aéreo, sino el progreso de una industria de alta tecnología que le diera mantenimiento y desarrollo a la red de radares, de igual forma, seguir con la construcción de POLAs permitiría darle a la Armada las herramientas para vigilar los mares nacionales, a la vez que serviría de base para el desarrollo de la industria naval, atrayendo empleos calificados. Pero no parece haber confianza en los proyectos sí fueron ideados en otros sexenios.    

A finales de agosto, la Secretaría de la Defensa Nacional lanzó un "llamado a propuestas" para fortalecer la capacidad de transporte aéreo pesado. Con ello, busca opciones en el mercado internacional para complementar y reemplazar a su flota de aviones C-130 Hércules con un nuevo avión de carga, que pueda transportar entre 20 y 40 toneladas. El requisito inicial es por dos aviones, pero si se quiere hacer bien, la FAM requerirá de una docena. Este será un gran proyecto digno de un país en pleno desarrollo. Por los recursos que requerirá, deberá de involucrar un fuerte compromiso de inversión tanto del Estado como del proveedor.

Para que una flota de aviones pueda ser mantenida en México, por ingenieros mexicanos, apoyando al desarrollo de la industria aeronáutica nacional, deben de estar dentro de una política de compensación industrial, comercial y tecnológica. 

POR IÑIGO GUEVARA MOYANO
DIRECTOR DE LA COMPAÑÍA DE INTELIGENCIA JANES Y ACADÉMICO VISITANTE DEL ATLANTIC COUNCIL, EN WASHINGTON, D.C.

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