COLUMNA INVITADA

Hablemos del Municipio

El deber de los funcionarios es atender las obligaciones que se les encomiendan por disposición constitucional, solucionar los problemas cotidianos de la comunidad y cumplir con la adecuada prestación de servicios públicos

OPINIÓN

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Jonás Sandoval/ Columna Invitada / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Foto: Especial

Los municipios son unidades de organización que permiten una dinámica particular de cercanía entre el gobierno y sus ciudadanos. Revisemos a continuación algunos aspectos sobre su origen, evolución y futuro.

De las múltiples nociones y definiciones sobre el municipio, destaquemos la propuesta que hace el Dr. Jorge Fernández Ruiz, quien sugiere que se puede identificar como la forma de relación social fincada en la organización vecinal con miras a dar solución a los problemas de la comunidad. Surgió como una construcción espontánea en la que los vecinos interactúan y buscan respuestas a sus problemas. Como es lógico, en la medida en que las sociedades evolucionan, sus unidades de organización se hacen más complejas, por lo que es necesario establecer normas que permitan la autorregulación.

La mayoría de las opiniones respecto a los orígenes de este concepto coinciden en que sus principales nociones nacieron en el Imperio Romano. Esta unidad de organización permeó en buena parte de Europa y evolucionó hasta que, en el siglo XVI, se trasladó a lo que hoy es México. Incluso antes de la llegada de los españoles existieron formas de convivencia social-política-religiosa en cada una de las culturas, las cuales pueden considerarse como antecedente de ese pacto social. Aquí se inscribe destacadamente el calpulli como una comunidad con diversos niveles de organización y autonomía.

En otras palabras, las características de los señoríos europeos, como la delimitación de territorios, la construcción de una identidad, autonomía y la distribución de actividades en cada uno, dieron pie a la consolidación de las organizaciones actuales en México. 

En 2019 se celebraron los 500 años del establecimiento de la Villa Rica de la Vera Cruz, hecho que recuerda la instalación del primer ayuntamiento en México como unidad social, política, económica y jurídica. Aún después de cinco siglos es difícil reconocer una identidad propia del ámbito municipal, pues como mencioné en la anterior entrega, existe una gran complejidad derivada de la confluencia de realidades en cada uno de los dos mil 469 que existen en nuestro país.

Esto deben servir como incentivo para analizar cómo ha evolucionado la noción del municipio a lo largo la historia, así como para reflexionar en torno al papel que juega en el entorno actual. ¿Cómo voltear hacia nuestro interior sin descuidar lo que sucede en lo externo a nivel estatal, nacional y supranacional?  Es ahí es donde resaltan las asimetrías existentes. ¿Cómo lograr nuestra integración en el proceso histórico que vivimos, sin interferir con las cosmovisiones particulares que nos identifican?

Los municipios son dinámicos y deben evolucionar al ritmo que lo hacen las relaciones sociales. Surgen debido a la necesidad que tienen los individuos de solventar sus problemas, bajo la creencia de que el trabajo en conjunto permite mejores resoluciones. Es justo ahí, en la interacción colectiva, en donde debemos enfocarnos para encauzar todos los esfuerzos hacia una mejoría para toda la comunidad.

La suma de voluntades individuales es y será el cimiento de los municipios. Encontrar los mecanismos para encaminar dicha fuerza social es lo que permitirá comprender y dar atención a las necesidades colectivas. Los municipios deben mantener una vocación de proximidad y contacto con los vecinos para incentivar el consenso a través de las autoridades. El deber de los funcionarios es atender las obligaciones que se les encomiendan por disposición constitucional, solucionar los problemas cotidianos de la comunidad y cumplir con la adecuada prestación de servicios públicos. El cumplimiento de estos aspectos es lo que ayudará a lograr la gobernabilidad de su territorio y población. 

POR JONÁS SANDOVAL  
EX DIRECTOR DEL ORGANISMO DEL AGUA EN TLALNEPANTLA 
@JONASSANDOVALO