DESDE AFUERA

¿Prioridades invertidas?

La presencia de AMLO hubiera sido importante en un encuentro con Jefes de Estado y de gobierno

OPINIÓN

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José Carreño Figueras / Desde Afuera / Opinión El Heraldo de MéxicoCréditos: Especial

El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, está en la reunión de jefes de Estado y de gobierno del G20, en Roma.

El presidente Andrés Manuel López Obrador irá la semana próxima a la ONU a un acto protocolar en el mejor de los casos: la asunción por México de la presidencia temporal del Consejo de Seguridad para el mes de noviembre.

Ebrard apareció en lo que parece una interminable sucesión de fotografías de campaña con varios de los lídres mundiales, a comenzar con el presidente de EU, Joe Biden, y la canciller alemana saliente, Angela Merkel.

Sólo le faltaron Vladimir Putin, de Rusia, y Xi Jinping, de China, para un álbum de recuerdos espectacular para una campaña política. El mandatario mexicano, dicen, va a pronunciar un discurso ante el Consejo de Seguridad de la ONU como expresión del interés de México en los organismos multilaterales.

La presidencia del Consejo de Seguridad es un cargo literalmente para moderar las sesiones del órgano, donde sus 15 participantes ocupan el puesto de manera rotativa, por orden alfabético, pero cinco tienen la posibilidad de detener cualquier proceso que inicie: Estados Unidos, China, Francia, Gran Bretaña y Rusia.

El problema, o la ventaja, es que no habrá otras luminarias políticas, pero su discurso apenas será escuchado fuera del recinto de la ONU, los especialistas de cancillerías, y por supuesto en México. Pero en este caso parecería una cuestión de prioridades invertidas.

Quien debió ir al G20 era el mandatario, tanto por la agenda como capacidad de decisión. Pero no es la primera vez que decide ignorar el encuentro, tal vez como señal de sus intereses: en lo doméstico, las relaciones con EU, América Latina, lo multilateral y lo demás.

Se puede o no estar de acuerdo con él, pero es el Presidente de México y su presencia hubiera sido importante en un encuentro donde la mayoría de los asistentes eran jefes de Estado y de gobierno. En cambio, irá a Nueva York, donde al margen de lo que haga en la ONU y su posible encuentro con António Guterres, secretario general del organismo, uno de los momentos memorables será su fotografía acompañado por tres presuntos aspirantes a sucederlo: el propio Ebrard, el embajador ante EU, Esteban Moctezuma, y el representante de México ante Naciones Unidas, Juan Ramón de la Fuente.

Habría la posibilidad de que se reúna con representantes del gran capital mundial. De hacerlo, podría presentar el caso de por qué es importante invertir en México y responder a preguntas o aclarar dudas respecto a lo que es y no la Cuarta Transformación.

Pero aún así, no puede evitarse la impresión de que el Presidente debió ir al G20.

POR NORMA GABRIELA LÓPEZ CASTAÑEDA
DIRECTORA DE INCORPORACIÓN Y RECAUDACIÓN DEL IMSS
@NORMAGABRIELAL5

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