La gran mayoría coincidimos en lo mismo, los mayores retos que enfrenta nuestro país en el año que comienza son 3: superar la crisis económica, reducir los niveles de inseguridad y lograr “domar” a la pandemia.
Si bien es cierto que los dos primeros, en gran medida son herencia de las administraciones anteriores, también lo es que muchos de sus efectos se han visto incrementados con el actual gobierno. Las cifras no mienten, estamos peor que cuando estábamos mal.
En cuanto a la pandemia, no podemos achacarles que ellos sean los únicos culpables, pero la rectoría en el manejo de la crisis sanitaria es de su exclusiva competencia y eso nadie puede minimizarlo.
A pesar de ello, Morena sigue contando con el respaldo de muchos ciudadanos, incluso, según distintas encuestas, es el instituto político con los niveles más altos de aceptación en el país, lo que demuestra que el gobierno federal y su titular, siguen teniendo el aval de millones de mexicanos, pues a pesar de no contar con cifras irrebatibles que demuestren avances sustantivos en los retos prioritarios, a sus seguidores les sigue pareciendo correcta la manera en que enfrentan los problemas nacionales.
La realidad hasta ahora, es que el inicio del año pinta bien para el movimiento de la 4T y sus intereses.
En 2021 México tendrá elecciones federales, y locales, en gran parte del territorio nacional habrá mucho en juego; pero, lo más importante para el gobierno federal, será retener su mayoría legislativa en la Cámara de Diputados, que, en caso de lograrlo, le permitirá mediante la aprobación de cualquier ley, consolidar su manera de gobernar y, por ende, cumplir con su objetivo de transformar al país en lo que ellos creen lo correcto.
Es cierto, México se está transformando, pero no todos coinciden en que sea por el camino más conveniente; para ellos, también existirá la posibilidad de tratar de incidir mediante su voto.
Como telón de fondo con la crisis económica, la inseguridad y la pandemia, en 6 meses los electores habremos de tomar una decisión que marcará el futuro de nuestro país; cambio, continuidad o equilibro, son nuestras opciones, y tienen que hacerse valer mediante nuestro voto el próximo 6 de junio. Será la decisión más importante que como ciudadanos tendremos que tomar en el presente año.
Sin prejuzgar la conveniencia de lo que cada uno decida, nadie puede decirse sorprendido por el resultado si no participa, será una oportunidad valiosa para hacer sentir nuestra conformidad o inconformidad con el rumbo del país.
2021 apenas comienza, pero está destinado a quedar en la posteridad como el año en que el poder de la 4T se consolidó, se equilibró ó disminuyó, por eso será un año decisivo en la historia de México.
Muchas bendiciones para todas y todos ustedes en el año que comienza. ¡Que soplen mejores vientos para nuestro país y para el mundo!
POR HÉCTOR SERRANO
COLABORADOR
@HSERRANOAZAMAR