COLUMNA INVITADA

Ante la frustración, defender a niñas, niños y jóvenes

Hay consenso en que necesitamos volver a otro tipo de escuela donde se organice una comunidad escolar comprometida con el aprendizaje

OPINIÓN

·
Laura Ramírez / Directora de activación de agentes en Mexicanos Primero / Columna InvitadaCréditos: Especial

Llega 2021, la pandemia continúa y las escuelas siguen cerradas. La campaña de vacunación inició, pero falta recorrer largo camino para que exista un impacto en la salud pública. La Secretaría de Educación Pública anunció el programa Aprendo en Casa III que mantiene la estrategia de aprendizaje centrada en la televisión.

En la encuesta de MEJOREDU 54% de las familias encuestadas manifestaron no haber recibido suficiente apoyo por parte de la escuela; 57% de estudiantes dijeron que no aprendieron cosas nuevas y 40% se sienten desanimadas (os).

En ese escenario y ante la frustración que la situación genera, hay tres temas donde las autoridades deben actuar y la ciudadanía exigir:

1. Defender la institución que trabaja y coordina todo lo relacionado con el derecho de NNJ: Se ha hablado de desaparecer el Sistema de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA), sin embargo resulta fundamental -y además está
en la ley- mantener un sistema dedicado a coordinar y articular políticas públicas para garantizar los derechos fundamentales de NNJ. Es una apuesta necesaria como país cuidar a las y los más jóvenes, es importante en lo que dure la pandemia y fundamental fortalecerlo para el futuro.

2. Generar mecanismos de presencialidad intermedia: No se puede regresar a la escuela mientras no haya garantía de seguridad en temas de salud; pero después de diez meses debemos empezar a pensar en opciones para que cada niña, niño, y joven cuente con el acompañamiento de sus maestras y maestros para seguir aprendiendo; no se trata de todas y todos al tiempo en la escuela, se trata de brindar un marco adecuado para las tutorías en centros comunitarios, para garantizar conectividad, para que las familias -especialmente las que han estado excluidas de la estrategia actual- cuenten con el acompañamiento de la comunidad
escolar (virtualmente o en encuentros seguros si el semáforo epidemiológico lo permite).

3. Enfocarnos en el regreso: no hay claridad sobre cuándo se podrá regresar a la escuela pero si hay consenso en que necesitamos volver a otro tipo de escuela donde se organice una comunidad escolar comprometida con el aprendizaje con colaboración pertinente de las familias, que se ponga énfasis en la educación socioemocional y que logre detectar a tiempo y revertir el rezago y el abandono.

No podemos empezar a construir esa escuela cuando el número de contagios disminuya, hay que empezar de inmediato a pensar, generar ideas, escuchar a las y los directores escolares, maestras y maestros, familias y sobre todo, NNJ sobre qué necesitan, cómo aprenden mejor, cómo pueden organizarse para fortalecer su comunidad educativa y de ahí tomar decisiones de políticas públicas y programas incluyentes.

Ante la frustración por la pandemia enfocarnos en NNJ es la mejor apuesta, es el camino para reencontrar el tejido social que se ha desgastado, es una apuesta al presente de cada NNJ pero también de sus familias, y es una esperanza a que una vez terminada la crisis de salud estemos listas y listos para atenuar los impactos negativos y caminar hacia una mayor y mejor garantía del derecho a aprender.

POR LAURA RAMÍREZ
COORDINADORA DE ACTIVACIÓN, MEXICANOS PRIMERO
@LAURAMI0316