ENLACE COMEXI

México y EU en 2021:revivir al diálogo económico

De una relación centrada en lo migratorio y la necesidad de establecer relaciones personales con el círculo íntimo de Trump, se pasará a un vínculo más ordenado e institucionalizado

OPINIÓN

·
Antonio Ortiz Mena/ Colaborador/ Opinión El Heraldo de México

Finalmente, el 23 de noviembre el presidente Trump accedió a iniciar la transición oficial del gobierno. Joseph Robinette Biden será el 46º Presidente de EU y Kamala Devi Harris será la primera vicepresidenta.

Biden y Harris enfrentarán grandes retos internos derivados de la pandemia del COVID-19, una precaria recuperación económica y una ciudadanía profundamente dividida. Trump logró obtener 11 millones de votos más que en la elección de 2016, y una distinta distribución estatal de tan sólo 0.001% de esos votos le hubiera podido dar el triunfo; quizá sin la pandemia hubiera ganado. Trump deja la Presidencia, pero el trumpismo y la división seguirán los próximos años.

En lo internacional, la relación EU-China seguirá siendo un tema preponderante; Biden y Harris estarán ocupados reforzando su alianza de seguridad con Europa y atendiendo temas en Medio Oriente. El cambio climático será un asunto central de la agenda, y la designación del excandidato presidencial y secretario de Estado John Kerry como enviado especial son muestras de que Biden va en serio, y su posicionamiento no era una estrategia de campaña.

En cuanto a América Latina y el Caribe, los debates en torno a Venezuela y Cuba seguirán siendo materia de encono entre demócratas y republicanos, pero la relación más importante será México. Es un tema ineludible desde lo económico, ambiental, energético y de seguridad nacional. De una relación centrada en lo migratorio y la necesidad de establecer relaciones personales con el círculo íntimo de Trump se pasará a un vínculo más ordenado e institucionalizado.

Esto es positivo para México, pues aunque pudiera haber mayores presiones de EU en asuntos laborales, ambientales, de derechos humanos y otros, los canales institucionales para abordar las diferencias y reforzar la cooperación serán más fuertes. Ya no se estará respondiendo al contentillo, ocurrencias y amenazas de Trump. Biden está nombrando profesionales no sólo honestos sino muy capaces.

Para aprovechar esta nueva realidad, a México le conviene reforzar la coordinación entre las dependencias del gobierno federal que inciden sobre política exterior, y un buen lugar para comenzar es en el ámbito económico. Durante la administración Obama, el entonces vicepresidente Biden presidió el Diálogo Económico de Alto Nivel, que facilitaba la coordinación de dependencias al interior de EU y de México para resolver retos de la integración económica e impulsar la competitividad de la región.

México podría proponer el establecimiento de un mecanismo similar que permita abordar al más alto nivel los principales temas que afectarán la relación económica bilateral en 2021: respuestas ante el COVID, cadenas de valor binacionales, energías renovables, manejo sustentable de recursos hídricos, capacitación, infraestructura fronteriza, entre otros.

EU estará centrado ante todo en el tema sanitario, económico y política interna. Ante ello, México tiene la oportunidad de proponer una agenda económica bilateral ambiciosa. Esperemos que se anime. 

 

POR ANTONIO ORTIZ MENA
ASOCIADO COMEXI
@ANTONIO_ORTIZM