Pues no sólo al Presidente de la República le pareció “muy raro” el robo de más de 35 medicamentos oncológicos –destinados a niños con cáncer- la madrugada del pasado domingo 4 de octubre en una bodega propiedad de la empresa Novag Infancia S.A. de C.V.

A farmacéuticas y especialistas en estos temas, aún más.

No sólo les parece rarísimo el robo en cuestión, sino distintos aspectos que rodean el caso. Se preguntan, por ejemplo:

1.-Si hubo una alerta en Argentina sobre estos productos en marzo, ¿por qué  traen a México esos productos en abril y mayo?

2.-Hasta donde se sabe, los medicamentos fueron traídos en primera instancia por la Marina. Luego, que por el Insabi, o por el IMSS, o el ISSSTE. No queda claro. En todo caso, ¿por qué cambiaron de procedimiento?

3.-Si los medicamentos (Ciclofosfamida Kemex) fueron traídos por instancias federales ¿qué hacían en Novag Infancia, un laboratorio privado dedicado principalmente a la venta de medicamentos sencillos, y que no cuenta con registro oncológico?

4.-¿Por qué medicamentos tan sensibles fueron llevados a una casita en Iztapalapa y no a un laboratorio de alta especialidad? ¿Por qué almacenarlos en un lugar tan inapropiado cuando este tipo de productos requieren control de temperatura, de luz, de humedad?

5.-¿Cómo es que estos medicamentos para niños con cáncer, que tantos dolores de cabeza han traído al gobierno federal, no contaban con mayor seguridad; incluso de la Guardia Nacional?

Las dudas no quedan ahí. La reacción de las autoridades ante el robo tampoco es clara: ¿Por qué la llamada de auxilio por parte del laboratorio la recibió el gobierno capitalino “muchas horas después”, según declaró la jefa de Gobierno de la Ciudad de México?

¿Por qué se llevaron específicamente los medicamentos oncológicos y algunos otros, cuando había otros que no se robaron y que también tienen mucho valor? Y ¿por qué tardaron tanto en abrir la carpeta de investigación? preguntó la misma Claudia Sheinbaum.

Van otra interrogante: ¿Por qué la Cofepris, en su primer comunicado señala que los medicamentos oncológicos robados “no cuentan con registro sanitario” y en el segundo comunicado borran lo del registro?

Tan raro es todo lo ocurrido  que circula esta hipótesis: Bien podría tratarse de un auto robo para tratar de ocultar que el medicamento no servía, que compraron basura.

Y nada más fácil para ello que salir en unos días con que ya encontraron los medicamentos en una casa abandonada y que se echaron a perder…    

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GEMAS: Obsequio del presidente López Obrador: "Nos costó trabajo conseguir estos medicamentos, los trajimos de Argentina..., y nos roban una bodega de estos medicamentos. Está esto muy raro”.