El clima global es un sistema complejo y dinámico, influenciado por una variedad de factores. Entre los más importantes se encuentran los fenómenos de El Niño y La Niña, dos caras de la misma moneda climática que tienen un impacto significativo en los patrones meteorológicos a nivel mundial y en México.
Comprender la diferencia entre estos fenómenos y sus posibles efectos permite ayudarte a la preparación y la toma de decisiones informadas.
El Niño y La Niña son fases opuestas de un fenómeno climático natural conocido como El Niño-Oscilación del Sur (ENOS). Este patrón climático se caracteriza por variaciones en la temperatura del agua en el Océano Pacífico tropical central y oriental.
- El Niño: Se define por un calentamiento anómalo de las aguas superficiales del océano. Este calentamiento altera los patrones de viento y las corrientes oceánicas, lo que a su vez afecta los patrones climáticos globales.
- La Niña: Es la fase opuesta a El Niño y se caracteriza por un enfriamiento anómalo de las aguas superficiales del océano. Al igual que El Niño, La Niña también provoca cambios en los patrones de viento y las corrientes oceánicas, con consecuencias climáticas distintas.
Diferencias clave entre El Niño y La Niña

La principal diferencia entre El Niño y La Niña radica en la temperatura del agua en el Océano Pacífico. Sin embargo, estas variaciones de temperatura desencadenan una serie de efectos climáticos contrastantes:
- Temperatura global: El Niño tiende a contribuir al aumento de la temperatura global promedio, mientras que La Niña generalmente tiene un efecto de enfriamiento, aunque este efecto puede ser modesto en el contexto del calentamiento global a largo plazo.
- Patrones de precipitación: El Niño y La Niña pueden alterar significativamente los patrones de precipitación en diversas regiones del mundo. El Niño puede provocar sequías en algunas áreas y lluvias torrenciales en otras, mientras que La Niña también puede causar sequías e inundaciones, pero en diferentes ubicaciones geográficas.
- Actividad de huracanes: En el Océano Atlántico, El Niño tiende a suprimir la actividad de huracanes, mientras que La Niña puede favorecer una temporada de huracanes más activa.
¿Qué se espera para México en 2025?
Según la información disponible hasta el momento, se espera que México experimente la influencia de "La Niña" en los primeros meses de 2025, con una posible transición a una fase neutra del ENOS.
Posibles efectos de La Niña en México:
- Mayor actividad de frentes fríos, especialmente en el centro y oriente del país.
- Posibilidad de eventos meteorológicos intensos, como tormentas fuertes y turbonadas.
- Potencial aumento de lluvias en algunas regiones.
- Mayor riesgo de sequías en el norte del país.
Transición a fase neutra:
- Se prevé una alta probabilidad de que el ENOS transite a una fase neutra durante la primavera y el verano de 2025.
- Una fase neutra generalmente implica condiciones climáticas más estables, con menor probabilidad de eventos extremos asociados con El Niño o La Niña.
Ante la variabilidad climática influenciada por El Niño y La Niña, es recomendable mantenerse informado sobre los pronósticos meteorológicos y las alertas emitidas por el SMN y otras autoridades.