A parte de dar alegría y de ser motivo de pagar los tamales, ahora los Niños Dios de las roscas también llevan esperanza a los niños y jóvenes diagnosticados con algún tipo de cáncer, ya que una asociación pidió no tirarlos, sino donarlos para reciclarlos.
Junto con la recolección de tapas de plástico, el Banco de Tapitas del Estado de México puso en marcha esa modalidad, pues ha observado que la gente ya no le da otro uso.
Xiomara Rodríguez Mondragón, del Banco de Tapitas, señaló que es un objeto que da mucha esperanza a las familias y que en esta época puede traer más significado para la gente que padece esta enfermedad.
Añadió que el Banco apoya con tratamientos, medicamentos y quimioterapias a personas de escasos recursos, que son las beneficiadas, pues son ellas quienes más los necesitan porque no pueden cubrir los gastos que se desprenden.
“Sabemos el significado que esto representa, pues los Niños Dios pueden hacer la diferencia en la quimio de un pequeño”, comentó.
Agregó que es una satisfacción que no tiene precio el poder apoyar y sumarse a la causa y saber que les están ayudando con algo para que los pacientes puedan tener una esperanza de vida.
La recolección ha tenido buena respuesta entre la gente que toma conciencia de la importancia de ayudar a los enfermos y en el cuidado del medio ambiente.
Algunas de las personas que acudieron a donar explicaron que contribuyen porque esta es una buena causa, además cuidan el medio ambiente.
Petra Mondragón, una donante, explicó que está “muy contenta, sobre todo porque, en mi caso, mi mamá falleció de cáncer, entonces se siente uno a gusto de colaborar”
MAAZ