El pasado 25 de junio, el Telescopio Espacial James Webb de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés), capturó al famoso Saturno. El favorito de muchos por sus excéntricos anillos estuvo bajo las primeras observaciones bajo un filtro infrarrojo. Las imágenes fueron tomadas por la NIRCam y ya han fascinado a los investigadores por el brillo que desprenden sus "adornos estelares" y lo oscuro que se ve el gigante gaseoso por su atmósfera pesada que absorbe toda la luz solar.
La NASA captura una imagen inusual de Saturno
La curiosa fotografía fue tomada como parte del programa 1247 de la observación de Webb. El proyecto incluyó varias exposiciones muy profundas de Saturno, las cuales fueron diseñadas para probar la capacidad del telescopio para detectar las lunas más débiles que orbitan en el gigante gaseoso. Y es que el propósito de tomar dichas imágenes es descubrir los satélites naturales más recientes que podría ayudar a los científicos a armar un panorama más completo del sistema actual de anillado cuerpo celeste, así como de su pasado.
La nueva imagen de Saturno ahora nos muestra con claridad los detalles dentro de su sistema de anillos como nunca antes fue visto. Asimismo, podemos observar varias de sus lunas como: Dione, Enceladus y Tethys. Gracias a las exposiciones adicionales, el equipo podrá sondear alguno de los "adornos estelares" más débiles del planeta, los cuales no son visibles, ni siquiera en esta fotografía. Hablamos en específico del anillo G delgado y el anillo E difuso. Recordemos que estos están formados por una serie de fragmentos rocosos y helados cuyas partículas varían en tamaño, van desde la más pequeña (como un grano de arena) hasta las gigantescas (cuyas dimensiones se asemejan a las montañas de la Tierra).
¿Qué se puede ver en la atmósfera de Saturno?
Gracias a las imágenes con el filtro infrarrojo, también se pudieron observar detalles sorprendentes e inesperados que emocionaron mucho a la comunidad científica. Aunque la nave espacial Cassini observó la atmósfera con mayor claridad, esta es la primera vez que el planeta se ve con esta transparencia en la longitud de onda particular, exclusiva del trabajo hecho por el Webb. Las grandes estructuras, oscuras y difusas en el hemisferio norte no siguen las líneas de latitud del gigante gaseoso. Esto hace que no nos parezca nada familiar el anaranjado ovalado de la fotografía. Al carecer de las típicas rayas que nos detallan las capas de la atmósfera, nos abre otro panorama del misterioso Saturno.
En sí, la irregularidad del planeta le recuerda a los científicos cómo las ondas planetarias a gran escala lucen en los aerosoles estratosféricos muy por encima de las nubes principales. Los resultados preliminares arrojaron que, al comparar los polos norte y sur Saturno (en esta imagen), las diferencias en apariencia son típicas de los cambios estacionales conocidos. Por ejemplo, el planeta actualmente está experimentando el verano del norte, con el hemisferio sur emergiendo de la oscuridad al final de un invierno.
Sin embargo, el polo norte es particularmente oscuro, quizás debido a un proceso estacional desconocido que afecta en particular a los polos. Un pequeño indicio de brillo hacia el borde del disco de Saturno podría deberse a la fluorescencia del metano a gran altitud. Pero debemos de tomar en cuenta que esta publicación de la NASA solo destaca los datos de la ciencia del Telescopio Espacial Webb en progreso, ya que aún no ha pasado por el proceso de revisión.