La tensión y el horror de los pasajeros dentro de un avión de Southwest Airlines fueron captados en un video cuando de pronto el vuelo que partió de Cuba con destino a Fort Lauderdale, Florida en Estados Unidos, comenzó a llenarse de humo cuyo origen fue identificado que venía de la cabina de los pilotos. Ante tal situación los desesperados pasajeros buscaron las máscaras de aire en un momento de caos por el temor de que ocurriera un fatal accidente.
Con la incertidumbre de saber lo que estaba pasando, los pasajeros estaban en un tenso momento de histeria, entre ellos había un niño cuyo llanto hacía todavía más dramático aquellos segundos de terror. En el clip difundido en las redes sociales, se observa el pánico de la gente que incluso tenía dificultades para poder respirar y ver por la intensidad del humo.
Pese a la tensión del momento, los pasajeros permanecían sentados en sus lugares con las máscaras de emergencia colocadas a la espera de saber qué era lo que estaba pasando y si estarían a salvo de ser víctima de un fatal avionazo. Uno de los pasajeros recordó que instantes previos al humo escuchó “un gran estruendo, como una explosión”, citó el New York Post.
¿Qué le pasó al vuelo de Southwest Airlines?
Tras haber despegado del aeropuerto de La Habana, el vuelo 3923 se llenó rápidamente de humo dentro de la estructura generando pánico que fue creciendo entre los pasajeros a medida que se extendía el humo y se desconocía lo que estaba ocurriendo en el avión. En el Boeing 737 iban a bordo 147 pasajeros, más los seis tripulantes del equipo. El piloto tuvo que realizar maniobras de emergencia para salvar a la gente.
Según los primeros reportes, el humo dentro del avión con destino a Florida, EU, se debió a que unas aves golpearon uno de los motores de la aeronave, además de la nariz del Boeing 737, lo que hizo que se incendiara parte del motor, indicó The Guardian. Algunos de los pasajeros sacaron sus teléfonos celulares para grabar los instantes de miedo que todos a bordo sufrieron. Steve Rodríguez, otro de los pasajeros entrevistados por el medio local NBC 6, aseguró:
“Para ser honesto, pensé que era mi hora de irme. Estaba aterrado”.
Rodríguez afirmó que la desesperación de los pasajeros creció porque fallaron las máscaras de aire del avión: “La gente comenzó a tomar el asunto en sus propias manos y a la fuerza golpeaba el techo para expulsar las máscaras, y la gente tenía los nudillos ensangrentados y todo porque estaban golpeando el techo. Había niños pequeños en el avión y mujeres mayores”.
Otro pasajero, Jorge Montesino relató que vio cómo se incendiaba el motor del avión, ante ello, envió un mensaje de texto desde su celular a su esposa y a su hijo para de alguna manera darles un último adiós. Sin embargo, la audacia del piloto del vuelo 3923 logró mantener a salvo a los pasajeros y a su tripulación tras conseguir haber aterrizado de emergencia.
“El capitán fue increíble. Con solo un motor, el motor izquierdo, pudo dar la vuelta al avión y aterrizar de manera segura”.
Por su parte, Southwest Airlines indicó: “Elogiamos las acciones rápidas y profesionales de nuestros pilotos y auxiliares de vuelo al responder a este evento. Pedimos disculpas a nuestros clientes por las molestias y nos hemos comunicado para atender sus necesidades y ofrecer apoyo”.
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