Una joven con capacidades diferentes fue atacada por uno de sus compañeros de escuela en la ciudad de Barreiras en Brasil. El atacante de 14 años de edad, llevó un arma de fuego a la institución para agredir a la chica que tomaba clases en silla de ruedas.
El violento ataque sucedió el lunes alrededor de las 7:20 de la mañana dentro de la Escuela Municipal Eurides Santanna cuando el menor de edad armado entró disparando al aire hasta que encontró a su víctima a la que consideraba una persona inferior a él, de acuerdo con información de la cadena de noticias TV Bahía.
El atacante recientemente se había mudado con su familia en la zona, los cuales llegaron desde la capital Brasilia. Los reportes de las autoridades indicaron que el adolescente es hijo de un policía por lo que pudo haber tomado el arma y comenzar a disparar. En las redes sociales se observa el momento cuando los demás alumnos comienzan a escapar del lugar para ponerse a salvo.
Según el vocero de la policía, Aparecido Freitas, indicó que el objetivo del agresor era una de sus compañeras identificada como Jeane Da Silva Brito de 19 años de edad, quien sufrió el ataque directo por parte del chico quien le disparó en dos ocasiones y posteriormente la cortó con un cuchillo.
“Vistiendo un uniforme negro, usando anteojos oscuros, entró armado desafiando a todos”, explicó el vocero.
No merecía perder su tiempo con "gente inferior"
El motivo de la agresión del chico se debió a que él mismo se considera una persona “santa” y “superior”. Sin embargo, tras asesinar a su compañera, el atacante fue detenido por la policía local que respondieron a los balazos recibidos, hasta que lograron detenerlo. “Cuando la policía llegó, le disparó y fue alcanzado”, dijo Aparecido Freitas.
Trascendió que el adolescente había planeado y anunciado el ataque en sus redes sociales, por causa a su superioridad que consideraba tenía sobre todos los habitantes de dicha región considerada como una de las más pobres de Brasil.
El agresor fue internado en el Hospital General del Oeste en Barreras, donde permanece en calidad de detenido. Según las indagatorias, el adolescente compartió en la deep web un manifiesto de 29 páginas con grupos de simpatizantes nazis, donde escribió que era un “iluminado” y que no merecía perder su tiempo con “gente inferior”.
En el documento, el niño puso que creía que iba a morir después de hacer el ataque. “Dentro de poco estaré con mi cara, ojos, pulmones y otras partes del cuerpo siendo devoradas por gusanos”, situación que no sucedió.
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