Seis días después del derrumbe de un edificio cerca de Miami, el saldo de muertos aumentó ayer a 11, de las cuales la mayoría tenía origen latino.
De acuerdo con la Policía local, los fallecidos provenían de Cuba, Venezuela, Puerto Rico y Texas.
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Además de cuerpos, los rescatistas han hallado restos humanos que los forenses tratan de identificar.
La alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, recomendó a familiares de los afectados que acudan a la comisaría de Policía para reportar su desaparición y se dejen tomar muestras de ADN para facilitar la identificación.
Los rescatistas indicaron que detectaron huecos, lo que les da una esperanza de que puedan encontrar sobrevivientes.
Por su parte, el presidente Joe Biden dijo que espera que el derrumbe sea investigado a fondo.
La portavoz de la Casa Blanca subrayó que lo que la Administración quiere es jugar un papel "constructivo" aportando los recursos federales que sean necesarios para "llegar hasta el fondo de lo ocurrido y prevenir para que no vuelva a pasar".
EFE Y AP
dza