El caso tras la muerte de Daunte Wright luego de que una oficial le disparara por "error", ha evolucionado rápidamente. Este miércoles, un fiscal confirmó que la exagente implicada será acusada de homicidio en segundo grado.
El cargo será en contra de Kim Potter, señalada por la muerte del joven afroamericano de 20 años, informó el fiscal Pete Orput del condado de Washington. De ser encontrada culpable, podría pasar hasta 10 años en prisión.
La Oficina de Detención Criminal de Minnesota -donde ocurrió el suceso- dijo que Potter había sido arrestada y puesta bajo custodia el miércoles por la mañana y que sería ingresada en la cárcel del condado de Hennepin.
Por su parte, Ben Crump, abogado de la familia Wright, dijo lo siguiente en un comunicado:
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“Si bien apreciamos que el fiscal de distrito esté buscando justicia para Daunte, ninguna condena puede devolverle a la familia Wright a su ser querido. No fue un accidente. Este fue un uso de la fuerza intencional, deliberado e ilegal".
El fatal error
El pasado domingo, Daunte Wright fue detenido mientras conducía porque tenía un ambientador en su carro que obstruía uno de los espejos, lo que se considera una infracción de tránsito. Cuando los elementos policíacos pidieron al joven detenerse, descubrieron que tenía una orden judicial. Al querer arrestarlo, el joven se resistió.
El joven salió por la puerta y la policía trató de esposarle, sin embargo, se zafó, entró de nuevo al auto y comenzó una lucha con los agentes. Posteriormente, se escucha a Kim Potter gritar “Taser, taser”, refiriéndose a la pistola eléctrica.
Pero cuando acciona el arma se da cuenta que en realidad tomó la pistola, y le había disparado mortalmente al joven. En el clip se puede ver que Wright ingresa al auto y parece poder escapar, pero se reportó que murió unos metros más adelante, y estrelló su coche.
El anuncio de que Potter será acusada por homicidio en segundo grado se da un día después de que ella renunciara a su cargo como policía, al igual que su jefe.
De acuerdo con The New York Times, la agente Kim A. Potter y Tim Gannon, presentaron sus renuncias, a través del sindicato. El diario detalla que Potter, envió una carta a sus compañeros en la que afirma que se retiraría de su cargo, tras más de 20 años de servicio.
“Me encantó ser oficial de policía y servir a esta comunidad de la mejor manera posible, pero creo que es lo mejor para la comunidad, el departamento y mis compañeros oficiales si renuncio inmediatamente”, señala en la misiva.
Tras la muerte del joven, protestas pacíficas -pero también violentos disturbios- han ocurrido en varias ciudades del país, al mismo tiempo que este nuevo suceso recuerda a la muerte de George Floyd en 2020 en el mismo estado.
El juicio contra Derek Chauvin, el expolicía acusado de matarlo al poner su rodilla contra el cuello del afroamericano por casi 10 minutos, inició hace apenas unas semanas.
CRS