Un perro no debe ser visto como un integrante del sistema de seguridad del hogar, ya que su presencia en nuestra familia va más allá de eso. Estas mascotas son dignos animales de compañía, fieles, cariñosos y mimosos. Aunque, es cierto decir que algunas razas de perros son adoptadas por su capacidad para cuidar la casa, garantizando el bienestar de la familia. En este marco, te diremos cuáles son esos canes.
Estas mascotas son tan fieles que en cuanto creen que sus familiares están en peligro, pueden morder a quien amenaza o ladrar para alertar a las demás personas de lo que sucede. Y siguiendo esta línea, el perro tiene un rasgo innato que, por su propia naturaleza, proceden a proteger a todos los integrantes de la familia.
Una de las razas de perros caracterizadas por esto es el Pastor holandés. Se trata de un animal de talla grande, con gran masa muscular y de estructura corporal fuerte y bien proporcionada. Es apegado a su dueño, obediente, siempre atento y con una gran capacidad y agilidad. Protegerá a su familia ante las últimas consecuencias, evitando que algo malo les suceda, más todavía si se trata de adultos mayores.
Desde Alemania llega el Rottweiler, un perro que en un principio se lo utilizó para proteger y pastorear ganado. Estos canes fueron utilizados en sus papeles tradicionales hasta mediados del siglo XIX y si bien todavía se utilizan en el pastoreo, hoy sus principales funciones son de can policía, o de defensa y seguridad, porque llevan en su sangre el instinto para garantizar el bienestar de los suyos.
Por último, una de las mascotas que se abocarán a esta tarea es el perro Bullmastiff, procedente de Gran Bretaña. En sus comienzos, estas razas de perros fueron utilizadas como guardianes de los grandes cotos privados de los terratenientes, con el propósito de perseguir y apresar a los cazadores furtivos. El can desarrollaba su actividad de acoso y derribo empujando a los ladrones con el peso de su cuerpo y echándoseles encima para inmovilizarlos.