Cuando acudimos al gimnasio a entrenar, es un momento en que nos debemos dedicar a nuestro propio engrandecimiento y esto es literal, porque buscamos tener un cuerpo más ancho y prominente, lo cual nos ayuda a nuestra autoestima.
Para ello es necesario que en estos momentos de entrenamiento, el tiempo se lo dedique solo a una persona: a ti mismo, pues es importante que dejes de lado todo lo que tengas, pues debes mantener concentrado en cada entrenamiento.
Es aquí donde radica la conexión de mente y músculo, una técnica muy útil para mejorar nuestro entrenamiento e incluso ganar masa muscular en el proceso.
¿En que consiste la técnica de conexión mente-músculo?
“Imagina que tengo una mancuerna, pero no la tienes”, es una frase que se popularizó por un influencer en redes sociales, pero que tiene algo de verdad, concentrarnos en el músculo que estamos trabajando en cada sesión.
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La conexión de mente-músculo, es un término que el mismo Arnold Schwarzenegger popularizó y que a la fecha sigue dando buenos resultados durante el entrenamiento, más aún si lo que buscamos es aumentar nuestra masa muscular.
La idea podrá parecer básica pero es muy efectiva: tener completa concentración en el músculo que estamos entrenando, liberándonos de cualquier tipo de distracción que interrumpa nuestro objetivo en ese momento.
¿Cuándo y cómo emplear la mente-músculo?
Esta técnica no es una aseveración científica comprobada, pero si es empleada por muchos fisicoculturistas de élite que buscan una mayor cantidad de ganancias musculares.
Pero si gustas aplicarla en tu entrenamiento es importante que sepas que no siempre podrás utilizarla, ya que se recomienda su uso solo en ejercicios de tipos aislados o monoarticulares.
Un ejemplo muy claro es el curl de bíceps con mancuerna, en el cual una de sus múltiples variantes justamente se le denomina “curl concentrado”, y esta es justo la manera en que pueden emplear la técnica de conexión entre tu mente y el músculo.
Para realizarlo debes aislar todo tipo de distracción a tu alrededor, incluso la música que estés escuchando, pues en tu mente debe haber una sola cosa, tu serie de bíceps.
La forma adecuada de hacerla es centrarte en levantar la mancuerna con la técnica correcta, no dejando de mirar tanto tu bíceps como el movimiento de tu brazo, cuidando que el tiempo de ejecución no sea rápido, sino moderado o lento.
Durante la ejecución también es importante que visualices que tu músculo va creciendo e incluso llegues a imaginar su resultado en cierto tiempo, esto te ayudará a incrementar aún más dicha conexión.
Recuerda que para obtener una buena conexión mente-músculo debes cuidar el peso que estas manejando, el cual debe ser diferente al de tu entrenamiento de fuerza; así como conocer a fondo la técnica de ejecución correcta para realizarlo, con ello lograrás maximizar cierto tipo de entrenamiento y llegar a tu meta fit más rápido.
Por: Hanzel Forteza
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