Otra de las cuestiones que han traído como consecuencia la pandemia por coronavirus es una cuestión social, en donde muchas personas son criticadas por salir a la calle, y en especial por estornudar, pues muchos pueden considerar que es una persona irresponsable que puede contagiarlos al estar en el mismo espacio que ellos.
Tal es el caso de muchas personas que llegan a tener alergia o incluso gripa que no esta asociada al coronavirus y que incluso con pruebas pueden descartar esta opción, pero de todas maneras es mal visto si llega a hacerlo en la calle, lo que por pena provoca que muchos nos aguantemos las ganas de estornudar si hay alguien cerca.
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La cuestión es que esto puede ser muy peligroso para la salud de quien evita estornudar e incluso puede traer consecuencias en nuestro cerebro y desencadenar la muerte en casos extremos.
Para muestra basta un botón, en donde un hombre que ingreso al Hospital Universitario de Leceister, en Reino Unido, tras sufrir los devastadores efectos de no estornudar correctamente. Esta persona fue diagnosticado de un dolor agudo de garganta, ronquera severa y la presencia de neumomediastino y enfisemas en la zona del cuello, la tráquea y la laringe.
Un estornudo reprimido puede provocar desde la irritación de las fosas nasales hasta la rotura del tímpano o la cóclea, estructura del oído responsable de la audición y el equilibrio. En los casos de extrema urgencia, este podría ocasionar incluso un derrame cerebral.
Las gotas de saliva y secreciones nasales que expulsamos con dicha reacción son una vía directa de contagio, pues de acuerdo con esta información la tos produce nubes de gas compuestas por agentes infecciosos, que salen despedidos de nuestro interior a más de 100 kilómetros por hora.
Entre las enfermedades respiratorias que se transmiten al estornudar encontramos la tuberculosis pulmonar, la influenza o la micosis pulmonar y por supuesto el Covid-19.
Para solucionarlo, lo ideal es usar un pañuelo que cubra la boca, no quitarse el cubrebocas, y contar con uno de repuesto en caso de requerirlo, cubrirse con la parte interior del codo al momento de estornudar.
Además de frecuentar lugares con buena ventilación. Si no, los patógenos infectados permanecerán en el aire el tiempo suficiente como para completar el contagio entre las personas del entorno.