En el mundo de los medios de comunicación y el periodismo existen entrevistas que ya sea por la relevancia de las declaraciones, la importancia de sus personajes o las terribles e inesperadas reacciones de sus protagonistas se han vuelto parte inolvidable de la historia quedando inmortalizadas en el recuerdo.
Una de esas “terribles” entrevistas, fue la protagonizada en 1971 por el reconocido periodista mexicano, Jacobo Zabludovsky, quien por esos años de su vida, era considerado como uno de los mejores comunicadores del país.
Mentor de periodistas como Lolita Ayala, Zabludovsky gozó de reconocimiento a nivel internacional, por ser entrevistador de figuras como María Félix, Cantinflas, el Che Guevara, Fidel Castro, Gabriel García Márquez, además de dar voz a momentos históricos como la llegada del hombre a la Luna o su narración, en vivo, de los desgarradores primeros momentos de la devastación causada por el terremoto de 1985 en la Ciudad de México.
Pese a esta gran trayectoria, Jacobo Zabludovsky, fue protagonista, a lado del pintor, Salvador Dalí, de uno de los diálogos más disparatados, incómodos y extraños ocurridos en una entrevista al grado de ser en muchas escuelas de periodismo, ejemplo de todo lo que no se debe hacer durante una entrevista.
¿Cómo fue la entrevista entre Jacobo Zabludovsky y Salvador Dalí?
Calificado como “surrealista”, este momento hilarante tuvo lugar en la casa del artista, en Portlligat, España. Desde la prueba de sonido, en la que Dalí se soltó a hablar en un “dialecto” que hizo preguntar a Zabludovsky si era japonés, a lo que el pintor respondió señalando que hablaba catalán.
Otro momento algo incómodo se dio cuando, a pregunta del periodista, Dalí respondió que la fuente de su genio era el ácido desoxirribonucleico (ADN) a lo que Jacobo preguntó, entre broma y seriedad, “¿Usted lo toma o cómo es esto?”.
La tensión se hizo presente ante este singular intercambio de ideas, lo cual no fue manejado de la mejor forma por el periodista quien, intentando obtener una respuesta reveladora del hombre que era considerado una especie de “genio loco”, cuestionó:
“Algunas gentes dicen que usted está loco...”; a lo que Dalí respondió “La única diferencia entre Dalí y un loco es que no estoy loco, es una diferencia mínima pero muy sustancial”, agregó, provocando que Zabludovsky riera.
Algunos docentes de los jóvenes periodistas, definen una entrevista como un encuentro similar a una pelea de box, donde debes medir tus golpes y soltar los mejores hasta el final, en este caso la pelea nunca se dio o en dado caso Dalí la ganó por nocaut, pues a lo largo del encuentro los dos interlocutores parecía estaban hablando en idiomas y de temas distintos.
A continuación puedes revivir una de las consideradas entrevistas más extrañas de la televisión mexicana: