Buena parte de los artículos incluidos en el decreto por el que se exenta el pago de 72 fracciones arancelaria de diferentes productos básicos son importados de países con los que México ya cuenta con tratado de libre comercio, por lo que su impacto en la inflación será mínimo, apuntó Luis Fernando Haro Encinas, director General del Consejo Nacional de Agricultura (CNA).
Si bien es cierto México tiene una balanza comercial agroalimentaria positiva, también hay un déficit en algunos artículos y precisamente se registra en los productos básicos, aclaró en entrevista con El Heraldo de México.
Hay datos, detalló, que refieren que más de 83 por ciento del arroz que se importa; 39 por ciento del maíz depende del exterior, 65 por ciento del trigo; 96 por ciento de la soya; 22 por ciento de la leche; poco más de 20 por ciento de la carne de aves y casi un 40 por ciento de la carne de puerco.
Agregó que esta medida no garantiza una disminución de precios, pues en varias partes del mundo también viven una crisis inflacionaria.
De ahí, destacó, que lo importante es incentivar la producción nacional de tal manera de que México deje de depender de la importación.
Héctor Garza, presidente de la Asociación Mexicana de Productores de Carne, coincidió en que México es un país abierto comercialmente y en este caso en la carne lo importante es que se tenga una atención relevante en el tema sanitario, con el cumplimiento a los protocolos ya establecidos.
Comentó que la inflación y su efecto en los precios es un problema a nivel internacional, por lo que la carne de res que pueda importarse, ya viene con estos efectos inflacionarios y no depende de los aranceles.
PAL