Frida Kahlo fue despedida por el pueblo mexicano hace 67 años cuando su cuerpo de 47 fue velado en el Palacio de Bellas Artes con la asistencia de personalidades políticas y culturales de la época como el ex presidente de México, Lázaro Cárdenas, David Alfaro Siqueiros, Juan O’Gorman, Lola Álvarez, María Asúnsolo, Heriberto Jara, entre otros.
Antes de su deceso, el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA) preparaba una muestra retrospectiva como homenaje nacional para la autora de cuadros famosos como “Las dos Fridas”, “Viva la vida”, “Unos cuantos piquetitos” y “Diego en mi pensamiento''.
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Frida Kahlo fue una artista polémica por la vida liberal que llevaba. Su personalidad fue adoptada como abanderada del feminismo, de la discapacidad, de la cultura mexicana y de la libertad sexual al tener un segundo matrimonio con Diego Rivera donde se permitieron tener vidas sexuales autónomas.
Frida Kahlo, velada con una bandera comunista
Hasta el día de su muerte por una embolia pulmonar según su acta de defunción, un 13 de julio de 1954, Frida estuvo envuelta en la polémica con una bandera del partido comunista que cubría su ataúd mientras era velada en el Palacio de Bellas Artes.
Según consta en las crónicas de la época, el cuerpo de la pintora iba ataviado con un vestido de tehuana, huipil blanco de Yalalag; anillos en todos los dedos de las manos y un collar de Tehuantepec.
Entre los invitados políticos estaban representantes de la embajada rusa en México, integrantes del Partido Comunista y alumnos de Frida que fue maestra de la Escuela Nacional de Pintura y Escultura “La Esmeralda”.
Fue uno de los pupilos de la artista del pincel, Arturo García Bustos quien se acercó al ataúd y colocó encima una bandera con el martillo y la hoz del partido comunista y así permaneció mientras rendían la guardia de honor. El acto causó polémica y los trabajadores del INBA pidieron a Diego Rivera quitar la bandera porque no estaba permitido que la ceremonia tuviera tintes políticos.
Diego Rivera se negó y la imagen del féretro de Frida cobijada por una bandera comunista quedó inmortalizada y dejó a Kahlo como una estoica de la doctrina económica, política y social que defendió en vida junto con Rivera al estar afiliada al Partido Comunista de México y brindar asilo a León Trotsky durante su exilio de Rusia. El episodio causó el despido del director general del Instituto Nacional de Bellas Artes, Andrés Iduarte.
Durante la cremación de Frida Kahlo, Siqueiros quien estaba cerca de la ventana del horno aseguró que parecía que su colega sonreía dentro de un girasol.
RMG