¿Tienes pensado mudarte o comprar un sofá nuevo? Si tu respuesta es sí, quizás debes saber que uno de los problemas de logística más complicados es mover un sillón. Sí, tal vez suena sencillo, pero no lo es debido a su tamaño, peso y delicadeza, dependiendo del material del que esté hecho.
Pasarlo por una puerta, o subir escaleras suelen ser tareas casi imposibles de hacer si no consideras las dimensiones de tu sofá al momento de comprarlo; ¿recuerdas lo que le pasó a Ross, Rachel y Chandler en aquel divertido episodio de Friends?
Para que no sufras este u otros problemas para manipular tu sofá y puedas disfrutar de un maratón de tus películas o series favoritas en la comodidad de tu sala, te traemos cinco tips para mejorar tu técnica y destreza la próxima vez que necesites mover tu sillón.
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¿Qué sillón debo comprar?
Primero es importante que sepas que el sillón que elijas, posiblemente será uno de tus lugares en casa; podrás pasar infinidad de horas viendo películas, partidos de futbol, tomando siestas o, por qué no, comiendo; por lo que tu compra debe ser una elección más que consciente.
Para escoger el mejor, considera tus, gustos, colores, costumbres e incluso tus otros muebles; que combine y sea cómodo para ti y toda tu familia. Incluso podría ser sofá-cama si sueles tener visitas; todo dependerá de tus necesidades.
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¿Cómo paso un sillón por la puerta?
Tal y como te lo mencionábamos, pasar muebles -en especial sillones- por una puerta es una de las tareas más difíciles hasta para los mudanzeros y fleteros más experimentados. Si quieres ahorrarte tiempo, dinero y no perder la paciencia, te compartimos estos cinco tips para hacer este momento más fácil.
- Antes de cualquier cosa, asegúrate de que el sillón que estás a punto de comprar no solo sea bonito, estético y combine con tus demás muebles en casa, sino que sea de un tamaño apropiado; lleva un metro contigo y toma sus medidas. Si de plano es más grande que el marco de tu puerta, o los pasillos del edificio donde vives, ¡ni lo compres!
- Algunos sofás son multimodales; es decir, que pueden separarse para hacer más fácil este proceso. Checa bien las instrucciones de tu mueble y tal vez sea más sencillo desarmarlo para que entre sin problemas en tu casa.
- Si este no es el caso, ¡manos a la obra!; cubre el sillón con plástico y otro material protector y manipúlalo lenta y suavemente, con diferentes movimientos y ángulos para intentar hacerlo pasar. Puede que te salga a la primera, pero si no, sigue intentando.
- Si de plano ningún movimiento funcionó, quita la puerta y su marco, así tendrás espacio adicional para lograrlo.
- Como última opción, puedes ‘volar’ tu sofá. Contacta a trabajadores especializados para que te ayuden a subir el mueble y pasarlo por ventanas, que generalmente son más amplias que las puertas.
Así que ya sabes, antes de comprar un mueble solo porque ‘está bonito’, considéralo dos veces. Checa sus dimensiones y asegúrate de que quepa por tus puertas, así no sufrirás al momento de llevarlo a casa.