El lunes 6 de agosto en 1979 a las seis de la mañana, inició el peculiar programa de radio que desafiaría los estándares de los programas de radio de la época.
A final de los años setenta la radio en México estaba separada en dos bloques principales, los programas que distribuían las noticias, y aquellos otros que se dedicaban a reproducir los éxitos musicales del momento, pero Sergio Rod y Bolívar Domínguez llegarían para atribuir su grano de arena y revolucionar el panorama de la radiodifusión en el país con "Batas, Pijamas y Pantuflas".
El programa transmitido por Sergio y Bolívar inició su locución a través de 590 AM por “La Pantera”, y posteriormente, en 1981, se trasladarían a “Radio Cañón” de Grupo Fórmula. De lunes a viernes a partir de las 6:30 de la mañana en el Valle de México, comenzaban su emisión, pero con un estilo único e ingenioso, a diferencia de los demás programas de esos años. Variaban los comentarios de burla, humor carismático, y pláticas con tonos agradables, todo esto mientras comunicaban el pronóstico del tiempo y reproducían música.
El repertorio de noticias y sencillos musicales se intercalaban con chistes despreocupados y comentarios irónicos, esto aunado al hecho de que los locutores llegaron a salir a la calle y convivir con la audiencia, además de su gran capacidad de poner en buen humor a todo trabajador que se dirigiera al trabajo por las mañanas, resultó en un alto y rápido ascenso al éxito para Sergio Rod y Bolívar Domínguez
Sin lugar a dudas, marcaron un hito en la historia de la radio mexicana, cuando a finales de 1970 los medios de comunicación carecían de la libertad de expresión y diversidad de métodos en hacer llegar las noticias a la población con las que se cuentan actualmente.
FOTO: Especial
El incidente
Desafortunadamente, la trayectoria del equipo de trabajo de “Batas, pantuflas y pijamas” cesó prematuramente debido al incidente que atravesaron causado por el terremoto de 1985, el histórico y más grande desastre natural que sacudió al país con tal brusquedad que, según diferentes fuentes ya que las cifras varían, llegaron a fallecer más de seis mil personas.
De acuerdo con Salvador Escobar, entre otros medios, los locutores se encontraban a la mitad de su transmisión cuando inició el terremoto, y Sergio intentaba tranquilizar a su público con las siguientes frases que, probablemente, fueron sus últimas palabras en vida:
“Calma, mucha calma, no tengan miedo, el movimiento es leve. ¡Ay! está muy fuerte, tranquilos vamos a llamar al cal...”
Varios testimonios y periódicos llegaron a confirmar que estos fueron los últimos momentos presentados por la radiodifusora. El edificio de Grupo Radio Fórmula se derrumbó, y causó la muerte de una considerable cantidad de personas dentro del inmueble, entre ellos Serio Rod y Bolívar Domínguez.