Desde afuera

¿Triunfo? ¿Transacción? ¿Qué sigue?

Y de paso, preocupado por las consecuencias internas de un choque sin sentido que solo ofendió a sus vecinos: de acuerdo con The Wall Street Journal, por ejemplo, el director

¿Triunfo? ¿Transacción? ¿Qué sigue?
José Carreño Figueras / Desde Afuera / Opinión El Heraldo de México Foto: El Heraldo de México

La posposición de medidas arancelarias contra Canadá y México a cambio de mayor vigilancia fronteriza contra la llegada de inmigrantes y drogas provocó un suspiro de alivio por cuanto mostró a un gobierno estadounidense dispuesto al menos a negociar aunque bajo sus propias condiciones e interesado en su propia imagen.

Y de paso, preocupado por las consecuencias internas de un choque sin sentido que solo ofendió a sus vecinos: de acuerdo con The Wall Street Journal, por ejemplo, el director de política doméstica en el Consejo Nacional de Seguridad, Stephen Miller, advirtió que la  sanción comercial pondría en peligro la colaboración mexicana contra la llegada de migrantes. Otros subrayaron que los recargos elevarían de forma intolerable el precio de los vehículos de marca estadounidense, que ahora son más bien de fabricación regional

La solución puso a Canadá y México parcialmente a cargo de la seguridad fronteriza de Estados Unidos, pero mantuvo la 'Espada de Damocles' comercial sobre sus cabezas, aunque quedan dudas.

No está claro si estos aranceles solo buscan extraer concesiones de los socios comerciales de Estados Unidos, o son parte de un proyecto que eventualmente los lleve a la autosuficiencia. Esa sería una explicación al menos del empeño de Trump en lograr la incorporación de Canadá y la anexión de Groenlandia: el acceso a recursos diversos, especialmente minerales. Pero tanto Canadá como México, habían hecho mucho ya de los que Trump ahora presume como triunfo propio: los canadienses habían ofrecido el programa de fortalecimiento fronterizo de 1,300 millones de dólares en diciembre. Añadir un nuevo zar del "fentanilo" no fue un gran problema político.

México ha enviado tropas a la frontera varias veces. En abril de 2021 envió 10 mil hombres a petición del expresidente Joe Biden. Ahora, de acuerdo con Trump, el despliegue será permanente. Y perdido entre la marea de reportes del fin de semana por la posible crisis comercial norteamericana, quedó el informe sobre las conversaciones del nuevo Secretario de Defensa estadounidense, Peter Hegseth, con sus contrapartes mexicanos de Defensa y Marina. El problema, en todo caso, es que ni Canadá ni México tienen claro cuál será el rumbo de las futuras conversaciones con Trump para evitar la imposición de tarifas comerciales.

Políticamente; sin embargo, Trump proclamó victoria: la prensa derechista estadounidense aseguró que había sido un triunfo político y su portavoz Karoline Leavitt proclamó en la CNN que Canadá y México "doblaron la rodilla". Pero la nueva tarifa comercial contra China entró en vigor y Beijing anunció que responderá con sanciones propias, mientras el Kremlin fustigaba reportes sobre la propuesta estadounidense de dar ayuda militar a Ucrania a cambio de acceso a los yacimientos de tierras raras. Pero ante una política transaccional, quedan dudas y una gran pregunta: ¿hasta qué grado se puede considerar a Estados Unidos como un aliado confiable?

POR JOSÉ CARREÑO FIGUERAS   

COLABORADOR    

JOSE.CARRENO@ELHERALDODEMEXICO.COM                                             

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