Tras una intensa precampaña en la que aspirantes de todos los partidos políticos intentaron posicionarse alrededor del país, llegamos a la intercampaña donde los partidos y las alianzas deberán definir quienes serán sus candidatos a los diferentes puestos de elección popular.
También, son semanas de organización de cara al proceso electoral: ¿cómo llegar de la manera más unida y con la estrategia más clara posible? Buscando elevar la competitividad de sus perfiles.
Lo hemos venido repitiendo, no es solo la presidencia de la República, sino 9 gubernaturas, la Cámara de Diputados y de Senadores, 31 congresos locales y cientos de presidencias municipales.
En tan solo unos minutos, el ciudadano tendrá que tachar entre cinco y seis boletas para definir el rumbo del país, de su estado y de su ciudad.
A unos días del arranque de las campañas, ¿cuáles son los retos que enfrentan cada uno de los partidos?
Para Morena es fundamental mantener de su lado el concepto de cambio. Sí, aunque el proyecto del presidente ya gobierne poco más de dos terceras partes del país, para sus simpatizantes siguen representando la “esperanza de la transformación”.
A su vez, han logrado definir a la oposición como la “continuidad que ya se va”, aunque el PRI, el PAN y el PRD ya solo gobiernen 21 por ciento de los estados.
Por su parte, la unidad puede definir el éxito o el fracaso de la 4T en esta elección. En la medida en la que Morena se ha vuelto más competitivo, cada vez son más los perfiles que buscan sus candidaturas. La ruptura ya demostró que tiene un costo alto como sucedió en Coahuila, por lo que algunos estados y municipios están en riesgo si no logran trabajar en equipo
Para el PAN, el PRI y el PRD el contexto es muy complicado. De arranque tienen que superar los negativos de las marcas. Sus campañas no pueden estar soportadas en partidos, sino en las fortalezas de sus candidatos. No es lo mismo la Xóchitl ciudadana que enfrenta al presidente que la Xóchitl que tiene que defender a sus partidos.
Y es justo en la competitividad de sus candidatos donde puede crecer su votación nacional. Una cosa es esperar que Xóchitl Gálvez aporte los votos para las elecciones locales y otra cosa muy distinta es que sus candidatos en los estados le ayuden a Xóchitl a cerrar la amplia brecha que existe con Claudia Sheinbaum.
Además, la socialización de la alianza es el reto que no han logrado resolver desde que se unieron en 2021. Hacer que un priista vote convencido por un panista y lo mismo con un panista que tendrá que elegir a un priista. Pueden ambos votantes estar en contra del gobierno de López Obrador, sin embargo, eso no significa que vayan a votar por el partido que históricamente combatieron.
En Movimiento Ciudadano el principal reto es mantenerse vigente. La precampaña de Samuel García logró emocionar a una parte importante del electorado pero, tras su salida, se redujo considerablemente la conversación en torno al partido naranja.
Veo cuatro temas: 1) hacer que la campaña presidencial deje de ser de dos perfiles para que se convierta en una lucha de tres, con un Jorge Álvarez Maynez que logre posicionar temas que hoy no están en la agenda pública, 2) buscar retener el gobierno de Jalisco, sus principales municipios e incrementar su presencia en Nuevo León, 3) llevar a la boleta a nuevos perfiles que sumados a proyectos populares como el de Mariana Rodríguez puedan convencer a ciudadanos alejados de la política y 4) pasar del aire a la tierra con la consolidación de un partido con presencia nacional.
Estamos a poco menos de 25 días de que arranquen las campañas. Son los momentos finales para que los partidos, las alianzas y sus candidatos terminen de organizar la que será la elección más grande en la historia del país.
POR PATRICIO MORELOS
PROFESOR DEL TECNOLÓGICO DE MONTERREY Y SOCIO DE POLIGRAMA
@PATOMORELOS
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