¿Un coche bomba? ¿Un dron? ¿Un tanque de gasolina? ¿Un petardo? ¿Qué estalló la madrugada de ayer en Culiacán, Sinaloa?
Versiones hay todas. Las autoridades del estado no se ponen de acuerdo. Es la estampa perfecta que describe el caos que se vive allá desde el pasado 9 de septiembre, cuando escaló la disputa entre “Los Chapitos” y la gente de Ismael “El Mayo” Zambada, tras la captura del narcotraficante luego de un secuestro a manos de Joaquín Guzmán López, el 25 de julio pasado, que ha dejado más de 500 asesinatos, cientos de personas secuestradas y vehículos robados.
Alrededor de las 03:30 am del 3 de diciembre, habitantes del municipio de Culiacán, Sinaloa, emitieron reportes sobre un fuerte estruendo en una de las calles de la colonia Limita de Itaje, al oriente de la capital.
Muy temprano, en la mañanera de la presidenta Claudia Sheinbaum, el secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, descartó que se tratara de un coche bomba.
“Al parecer es un artefacto como un tipo dron (se descarta que haya sido un coche bomba)”, dijo.
¿Qué fue lo que explotó, entonces?
Un par de horas más tarde, el secretario de Seguridad estatal, Gerardo Mérida Sánchez, dijo que la propagación de las llamas en un vehículo posiblemente habría sido causada por un incendio del tanque de gasolina.
“Es preciso decir que en lo personal fue el tanque de gasolina, que se incendió todo el vehículo, sí, pero vean la cabina, está completa”, señaló el secretario de Seguridad estatal.
“¿Hubo disparos? Puede ser que sí, porque un disparo al asiento, por la velocidad y temperatura del proyectil, se puede incendiar el vehículo. O bien, alguna acción incendiaria que provocó en la camioneta esto, pero no es el dron en sí”, remató.
No pasaron ni un par de horas, y el gobernador Rubén Rocha Moya daba su propia versión.
Él dijo que el estallido fue causado por un petardo con pólvora. O sea que ni coche bomba, ni dron, ni tanque de gasolina.
“Ya fue revisado técnicamente, es un petardo que tiene pólvora, que explota. Por fortuna no lesionó a nadie ni tuvo efectos contra la vida de alguna persona. Eso es manejado con dron, un poco lo que se había venido presentando”, señaló el gobernador, respaldándose en análisis realizados por especialistas federales.
¿Qué estalló, entonces? Depende a quién le crea usted. De ese tamaño es el caos en Sinaloa, donde hace casi tres meses el gobierno no existe, la ley es un adorno y la autoridad no lo es.
POR MANUEL LÓPEZ SAN MARTÍN
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@MLOPEZSANMARTIN
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